¿Has notado últimamente que encuentras furgonetas blancas aparcadas junto a la carretera? Quizás te hayas cruzado con la nueva estrategia de la Dirección General de Tráfico (DGT) para perseguir a los conductores que cometen infracciones de tráfico.
Junto con los tradicionales radares, helicópteros e incluso drones, ahora el organismo también recurre a vehículos camuflados. Utilizan este tipo de furgonetas blancas porque, según reconocen, pasan completamente desapercibidas.
Aunque no solo son furgonetas blancas. También se encuentran de color negro y azul. Las furgonetas son perfectas para que los controles pasen desapercibidos, pero también para el tipo de infracciones que la DGT quiere perseguir.
Hasta 200 euros de multa
La DGT busca multar a aquellos infractores que hagan uso del teléfono móvil sin emplear los sistemas homologados. Desde hace tiempo, el organismo está empleando este tipo de furgonetas para vigilar el tráfico en las carreteras españolas. La estrategia comenzó en Galicia y, ahora, se está extendiendo a todas las carreteras españolas.
Actualmente, este tipo de infracciones se multan con 200 euros y la retirada de 3 puntos del carné por utilizar el teléfono mientras se conduce. Sin embargo, la reforma de la ley espera una sanción aún peor: 6 puntos por tener el teléfono en la mano.