El nuevo coronavirus, SARS-CoV-2, puede afectar a cada organismo en función del grupo sanguíneo del paciente. Ese es el resultado consensuado entre las dos conclusiones obtenidas de sendos trabajos publicados en la revista Blood Advances, en un equipo de científicos del Hospital Universitario de Odense (Dinamarca) y la Universidad de Columbia Británica (Canadá).
No es la primera vez que se vincula el grupo sanguíneo a la vulnerabilidad al virus, pero este estudio sí concluye con fiabilidad. En este caso, indica que las personas con tipo O pueden tener el menor riesgo, mientras que aquellos con A y AB pueden presentar mayores riesgos de cuadros clínicos severos.
Esto refuta el estudio publicado en New England Journal of Medicine el pasado mes de junio. Allí se indiciaba que las personas con sangre tipo A tienen un 50% más de riesgo de necesitar apoyo respiratorio durante la enfermedad, mientras que el grupo O ofrece "efecto protector".
Los resultados de los estudios parecen avalar que las personas con el tipo de sangre O pueden tener un menor riesgo de infección por Covid-19, sobre todo a la hora de desarrollar un cuadro grave de la enfermedad, incluyendo complicaciones en los órganos, según la Sociedad Americana de Hemaotología.
Para concluir estas afimaciones, los investigadores compararon los datos del registro sanitario danés de más de 473.000 personas a las que se les hizo la prueba del Covid con los datos de un grupo de control de más de 2,2 millones de individuos de la población general.
Grados de riesgo
Entre las personas que dieron positivo, encontraron menos personas con tipo O y más con tipo A, B y AB; sin ninguna diferencia significativa entre los tipos A, B y AB relevantes.
En un estudio retrospectivo, los científicos constataron que las personas con grupos sanguíneos A o AB parecen mostrar una mayor gravedad de la enfermedad que las personas con grupos sanguíneos O o B.
Con ello, fueron 95 pacientes en Vancouver, Canadá, que en el caso de los tipos A o AB sufrían mayores lesiones pulmonares o requerían diálisis por un problema de insuficiencia renal. Esto, sin embargo, no se producía en pacientes con tipo O.
Aunque el estudio añade pruebas e indicios de cómo interactúa el coronavirus con cada tipo de sangre, el equipo de científicos que ha participado en este estudio recalca que es necesario continuar con las investigaciones.
