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Pasar largas horas en la playa o en la piscina tomando el sol en una de las actividades estrella del verano. Ello provoca que en esta temporada del año se den numerosas quemaduras en la piel, especialmente no lo aplicamos protector solar. Hay que tener cuidado, pues estas lesiones pueden ser muy peligrosas.
Los efectos de las quemaduras sobre la piel son acumulativos y aumentan las probabilidades de que podamos padecer cáncer en la piel. Además, podemos sufrir quemaduras graves que requieren de atención médica. Uno de los efectos más graves es que nos alagan ampollas, que hay que saber cómo tratar.
Si las ampollas ocupan el 20% o más de la quemadura se requerirá atención médica pues reviste más gravas que aquellas que solo presentan enrojecimiento. Con las ampollas se corre el riesgo de que se exploten y supuren pudiendo provocar infecciones o erupciones. Además, también pueden dejar manchas o hiperpigmentación.
Pasos a seguir
En el caso de que las ampollas sean pequeñas o se encuentran aisladas, podremos tratarlas en casa siguiendo unos sencillos consejos, aunque siempre vigilando si llegan a infectarse.
No las explotes bajo ningún concepto pues aumenta el riesgo de infección. Es recomendable tener especial cuidado evitando roces innecesario o ropa ajustado para evitar el escozor y que no se exploten por este motivo.
En el caso de que revienten por sí mismas, lava la zona suavemente dos o tres veces al día con jabón y agua tibia.
Entre los lavados, cubre la zona con una compresa o vendaje hasta que cicatrice.
No utilizar cremas o aerosoles para quemaduras a no se que lo prescriba el médio. En este caso, te recomendará alguna crema antibiótica con corticoides para reducir la inflamación, el dolor y evitar o tratar infecciones. Evita las cremas tópicas con alcohol.
Evita aplicar remedios naturales. Aunque algunos como la manzanilla, té frío o el pepino pueden ayudar a calmar el dolor, suelen incrementar el riesgo de infección. El hielo es una buena opción.
En caso de dolor, toma paracetamol o un antiinflamatorio no esteroideo como el ibuprofeno.
Mantén hidratada la zona de alrededor con cremas específicas calmantes, con aloe vera. Hay que evitar la zona de la ampolla, especialmente si se ha roto.
Bebe abundante agua, pues ayudara a mantener la piel hidratada y acelerar la recuperación.
No vuelvas a exponerte al sol hasta que las ampollas y la quemadura en general estén completamente curadas. Cuando lo volamos a hacer, utiliza protector solar de factor máximo, pues tendrás la piel mucho más vulnerable después de la lesión.