El final de la era Rajoy tras la exitosa moción de censura de Pedro Sánchez abre una guerra interna para lider el Partido Popular.
Los movimientos internos están iniciando una guerra entre las distintas familias de la formación conservadora que se antoja especialmente dura. No hay que olvidar que el PP podría enfrentar un riesgo de 'Pasokización' a la griega (es decir, un descalabro similar a la UCD en 1982) si Ciudadanos se convierte en el gran ganador de las autonómicas y municipales de 2019. ¿Quién sucederá a Rajoy?
1 María Dolores de Cospedal
La acumulación de cargos de Cospedal ha originado un fuerte debate, en el que la opinión de Rajoy fue determinante: conserva la totalidad de los seis títulos que han provocado reticencias entre sus enemigos.
Hasta ahora, Cospedal ha ostentado toda esta lista: Ministra de Defensa, Secretaria General del PP Nacional, Secretaria General del PP en Castilla-La Mancha, diputada en el Congreso, diputada en el Parlamento castellanomanchego y líder del grupo popular en la cámara autonómica. Hasta seis cargos de gran relevancia que han generado reticencias entre sus enemigos.
La única debilidad que mantiene la titular de Defensa se centra, básicamente, en la pérdida de apoyos dentro del Gobierno y en el carácter tecnocrático de su cartera. Este último hecho deja a Cospedal sin la posibilidad de hacer política real y construir un currículum para vender en las futuras elecciones.
Pero, sin duda, la pérdida de apoyos dentro del Gobierno es evidente. Cospedal lidera el denominado G-8, donde únicamente destaca el actual ministro del Interior Juan Ignacio Zoido. Este último controla una cartera clave a la hora de gestionar la legalidad en Cataluña, aunque su imagen se ha debilitado tras las cargas del 1-O. Por otro lado, la salida de 'pesos pesados' como el exministro de Asuntos Exteriores, García Margallo, supuso un duro golpe a favor de su gran enemiga: Soraya Sáenz de Santamaría.
2 Soraya Sáenz de Santamaría
Considerada como la gran apuesta de Rajoy, su gran ascenso (comenzó en el 2000 como asesora jurídica de Rajoy y ha terminado como líder del CNI y vicepresidenta del Gobierno) generó serias críticas entre sus enemigos.
La confianza de Rajoy es absoluta. Soraya es la encargada de gestionar todas las crisis políticas, gracias a que el presidente delega en ella todas las responsabilidades más complicadas del Gobierno.
En este último punto, destaca su nombramiento como Ministra para Asuntos Territoriales, una cartera que incluye, básicamente, la capacidad de interlocución entre el Gobierno y el independentismo. Soraya llegó a pasar largas temporadas en Barcelona, aunque su buena relación con Junqueras no fue determinante que el separatismo cambiara de posición.
Gran parte del Partido Popular critica su "falta de ideología", porque consideran que "podría encontrarse en el PP, como en Podemos o el PSOE". A diferencia de Cospedal, que aboga por un perfil más político; la vicepresidenta ha ejercido un papel tecnocrático desde su cartera (se ha alejado especialmente de los núcleos más conservadores). Mantiene grandes apoyos en el Gobierno, entre los que destacan Álvaro Nadal (Energía), Fátima Báñez (Empleo), Isabel García Tejerina (Agricultura), Dolors Montserrat (Sanidad) o Rafael Catalá (Justicia).
La mayor fortaleza de Soraya es, sin duda, su papel como cabeza de los servicios secretos (CNI). El nombramiento de Félix Sanz Roldán, hombre de confianza de la vicepresidenta, le ha permitido un fuerte control de las instituciones y ganar la cautela de sus rivales. Precisamente, su control del CNI llega después de que Rajoy cambiase su titularidad de Defensa a Vicepresidencia.
Llama también la atención su intención de controlar en 2015 los servicios de Inteligencia de la Policía, Guardia Civil y Fuerzas Armadas; aunque estas intenciones provocaron un deterioro de la relación con el presidente del Gobierno que, a día de hoy, se ha solucionado.
3 Ana Pastor
La presidenta del Congreso cuenta con el apoyo incondicional de Rajoy y con un perfil 'más amable' que le ha permitido mantener una buena relación con todos los partidos del arco parlamentario (incluido Podemos).
El gran problema de Ana Pastor es su falta de reconocimiento público y manejo de la oratoria o atractivo en sus apariciones públicas. Pastor no cuenta con un perfil conocido en política y su cercanía a Cospedal podría jugar una mala pasada a la hora de iniciar una guerra por la sucesión.
Pastor, sin embargo, es la gran favorita de Rajoy, por la gran relación que ambos mantienen y el carácter similar en la gestión política. A pesar de ello, es la candidata con menor posibilidad, con el actual permiso de Cifuentes.
4 Alberto Núñez Feijóo
Alberto Núñez Feijóo es el eterno sucesor de Rajoy. Estas posibilidades se reforzaron tras las autónomicas gallegas, en las que se convirtió en el único presidente autonómico que goza de mayoría absoluta para gobernar.
Sin embargo, su imagen fuera de Galicia no goza de la misma fuerza que dentro de su región. A ello, se suma su nula presencia en el PP nacional, lejos de las anteriores caras que hemos mencionado. Aunque su relación con Rajoy sea correcta.
Por otro lado, sus fotografías con el reconocido narcotraficante gallego Marcial Dorado, en un yate; son un auténtico jarro de agua fría a la hora de mantener un debate electoral en cualquier medio de comunicación.