La llegada de 2023 implicará importantes novedades que incluirán restricciones para la circulación de determinados vehículos. La Ley de Cambio Climático y Transición Energética lleva a los municipios de más de 50.000 habitantes a establecer áreas con restricciones al tráfico para mejorar la calidad del aire, algo que afectará a aquellos conductores de grandes ciudades como Madrid o Barcelona, con Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), o aquellos que pretendan acceder al centro de estas ciudades desde fuera.
Los coches con etiquetas A, B y C tendrán el acceso restringido en ciertas ciudades por la aplicación de la citada ley, que establece que estos municipios con mayor densidad de población deben habilitar Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
Las ZBE afectarán a más de 11 millones y medio de coches, que circulan por ciudades españolas obligadas a tener una de estas zonas en 2023, según la legislación establecida. De todas ellas, 4 millones de coches verán comprometida su circulación por no disponer de etiqueta, según datos de Sumauto.
Por ello, el 32% del parque móvil de estas ciudades tendrá problemas de circulación futura, ya que no cumplirá los requisitos de la DGT para portar el distinto medioambiental exigido, por lo que se exigirá una renovación.
Ante esta fecha de caducidad anunciada, sus propietarios están llamados a renovar la flota móvil y, sin planes de actualización, podrían quedarse estacionados indefinidamente, puesto que podrían tener derecho a obtener la tarjeta de residente para aparcar en zona verde. También existe la posibilidad de que sus propietarios los saquen a la venta, ya que pueden ser atractivos como bajo precio para zonas rurales o pequeñas poblaciones; así como para su exportación.
Vehículos afectados
La etiqueta del vehículo implicará una serie de restricciones. Si se cuenta con la letra A, se verán los mayores problemas, puesto que son aquellos matriculados antes del año 2001 y no podrán circular por áreas acotadas por los ayuntamientos, aunque se establecen algunas excepciones.
En cuanto a la etiqueta B, corresponden a turismos y furgonetas ligeras propulsadas por gasolina y matriculadas a partir de enero del 2000, o diésel a partir de enero de 2006. Los coches con pegatina B pueden acceder a las ZBE, pero no aparcar dentro de ellas. Podrán circular y aparcar por las calles perpetradas de cualquier provincia, con excepción de Madrid, donde no se podrá estacionar en la almendra central.
En el último lugar, nos encontramos con los vehículos de etiqueta C, aquellos turismos y furgonetas propulsados por gasolina, matriculados en 2006 y los diésel puestos a la venta a partir de 2014, además de los vehículos de transporte de mercancías matriculados de 2014 en adelante. En este caso, podrán circular por cualquier Zona de Bajas Emisiones (ZBE), aunque en Madrid sí que existen algunas restricciones para vehículos de este tipo.