En enero saltaba la noticia en España: ¡Hacienda no somos todos! Eso sí, los vítores tenían que hacerse esperar, pues la buena nueva tan sólo parecía referirse a la Casa Real. Los españoles, al parecer, seguíamos siendo Hacienda.
Sin embargo, en el mes de septiembre se nos recordó (pues esto ya lo sabíamos) que los clubes de fútbol tampoco eran Hacienda. Ya sólo queda esperar al momento en que descubra que yo tampoco lo soy y, ¡a vivir la vida! Mientras, toca seguir trabajando.
Y decimos esto acerca de los clubes de fútbol porque el 1 de septiembre se dio a conocer la sonrojante cifra que deben los clubes españoles al fisco: Nada menos que 230 millones de euros. Algo más que el recorte que hizo el gobierno a RTVE, por poner un ejemplo. Vaya, ¿qué haces que no lo estás celebrando? Efectivamente, es una noticia que leída así a pelo llama poco al esparcimiento y la jarana. Sin embargo, debería suponernos una alegría, ya que esta deuda, hace apenas tres años y medio, era de 650 millones de euros.
¿A qué se debe esta rebaja de casi el 65% en tan sólo 3 años y medio? En parte, ayuda que los ingresos televisivos de los clubes casi se hayan duplicado en los últimos dos años, aunque Fernando Puig de la Bellacasa (subdirector general del Consejo Superior de Deportes) asevere que "los ingresos por televisión no influyen en el saneamiento de los clubes, el pasado nos demuestra que tenerlos provocó mayor gasto".
Pero la realidad es que, en la temporada 2014/15, los clubes españoles facturaban menos de 700 millones de euros por derechos televisivos; esta campaña, rozan los 1.300 millones. Además, el Real Madrid y Barcelona parecen estar completamente en paz en cuanto a la Hacienda Pública se refiere: ambos deben 0 euros. En el polo opuesto, están los seis clubes que se reparten el 70% de esa deuda: Atlético de Madrid, Espanyol, Valladolid, Mallorca, Zaragoza y Elche.
Por otro lado, la Hacienda española no es ni de lejos la única perjudicada por las deudas del fútbol profesional. Si el hecho de que 230 millones de deuda os parecen sacrílegos, aunque desde la Agencia Tributaria (AEAT) se asegure que el pago por parte de las entidades está garantizado (de hecho sólo 4 clubes menores, que suman 40 millones de deuda, se encuentran en la "lista de morosos" de Hacienda), os pedimos que os acomodéis bien, pues la deuda global de los clubes de fútbol es de, ni más ni menos, ¡1.800 millones de euros sin contar las deudas de Madrid y Barça! En este caso, hablamos de otras instituciones además de la Hacienda Pública.
Sin embargo, la permisividad con la que se trata este tema, y la ligereza con la que se asegura que no preocupa debido a los ingresos que los equipos de fútbol generan, choca de frente con la agresividad, dureza e inflexibilidad de las instituciones públicas para con los deudores individuales, que ni sueñan con deudas de tales magnitudes. Y es que todo ello nos lleva a preguntarnos (de nuevo): ¿Es esta otra Hacienda distinta a la mía o es que, simplemente, es cierto que no todos somos Hacienda?