El anteproyecto de ley de Libertad Sexual aprobado este martes 3 de marzo en el Consejo de Ministros reconoce y garantiza el derecho de las mujeres a una vida libre de violencias sexuales. Esta legislación conocida como la ley del "sólo sí es sí", pretende luchar contra todas las violencias que sufren las muejres y pretende garantizar que todas ella puedan tener derecho a ejercer el control sobre su sexualidad, al bienestar sexual, a la integridad sexual y a elegir con quién mantener relaciones sexuales, según ha informado el Ministerio de Igualdad.
Unidas Podemos ha logrado introducir en la ley esta propuesta que ya plantearon hace dos años desde la oposición, en la que se castiga con cárcel el acoso sexual que sufren las muejres en la vía pública, en bares, fiestas privadas o discotecas. Irene Montero ha explicado que las penas relacionadas con el "acoso ocasional" podrán ser catigado con arresto domiciliario, hasta un mes de trabajos comunitarios, multas y medidas de alejamiento.
"La clave de la ley que pone en el centro el consentimiento", ha explicado Irene Montero en la rueda de prensa para explicar los detalles de la norma. Hasta ahora las mujeres debían probar ante la justicia que había sometimiento, que había violencia o intimidación para denunciar por abuso sexual. Con la aprobación de esta nueva legislación la importancia recae sobre el consentimiento, es decir, la libertad sexual.
La ministra ha aclarado que esta ley solo se puede comparar con la de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género de 1/2004, pero a diferencia de esta, la ley de Libertad Sexual protege a las mujeres frente a todas las agresiones sexuales "y frente a todas las formas de violencias sexuales, y las reconoce cómo violencias machistas", aclara Montero. Además, añade que esta especificación era algo que les exigía tanto el convenio de Estambul como el Pacto de Estado.
Esta ley pone a disposición de las víctimas de este tipo de acosos un sistema de atención especializado formado por expertos y expertas que las acompañarán en su toma de decisiones, sin cuestionar el relato de los hechos. Esto supone una ley integral, la cual previene, detecta, sanciona y erradica las violencias sexuales. Por otra parte, protege y garantiza el derecho de reparación de las víctimas.
Según Cadena Ser, algunos sectores del Gobierno consideran que esta ley propuesta "presenta deficiencias técnicas y jurídicas y que el texto sobre la modificación del Código Pena está poco elaborado". Ante estas diferencias, Moncloa ha decidido que sea la vicepresidenta Carmen Calvo la encargada de coordinar la ley de libertades sexuales. Por su parte, Unidas Podemos critica que el Ministerio de Justicia haya paralizado la propuesta y no vayan a incumplir el acuerdo de aprobarla antes del 8 de marzo.
1 Dónde se aplicará la ley
El ámbito de aplicación incluye a todas las mujeres que hayan sido víctimas de algún tipo de violencia machista en España. Podrán denunciar personas extranjeras o que no hayan nacido en el país, pero que residan aquí. Además, también podrán interponer denuncias aquellas españolas que residan fuera y pueda perseguirse el delito desde España.
"Por el hecho de que la edad de consentimiento sexual está establecida a partir de los 16 años, esas mujeres también tendrán protección de la ley", explica el departamento del Ministerio de Igualdad.
2 Será penado el acoso ocasional
Se reformará el código penal para introducir como delitos sexuales la intimidación, mutilación genital femenina, matrimonio forzado y trata con fines de explotación infantil. A partir de ahora también se incluirá el "acoso ocasional", que además de incluir el acoso callejero, tiene en cuenta cualquier tipo de abuso o acoso realizado en la vía pública y en recintos privados, como por ejemplo conciertos, discotecas o bares.
Se entenderá como tal aquellas "expresiones, comportamientos o proposiciones sexuales o sexistas que creen en la víctima una situación objetivamente humillante, hostil o intimidadora". Este delito estará penado con arresto domiciliario, multas y hasta un mes de trabajos comunitarios.
3 Se elimina la distinción entre abuso y agresión
La ley reduce las penas más altas y sube las que estaban condenadas con menos años. De acuerdo con la propuesta de Igualdad, se castigrará con la pena de prisión de hasta cuatro años a cualquier comportamiento sexual "que atente contra la libertad sexual de otra persona sin su consentimiento".
Irene Montero ha señalado que esta eliminación es una de las reclamadas por el movimiento feminista, a quien les ha agradecido reiteradamente durante la ponencia el apoyo y su lucha contínua. "Los gritos del movimiento feminista se van a ver reflejados en esta ley", ha añadido la ministra.
Las condenas por violación irán desde los 4 años hasta los 10, aunque se podrá elevar a 12 si concurre en circunstancias agravante y a 15 si ocurren dos o más. En el caso del delito de acoso sexual, se penará de tres a siete meses o multas y un máximo de 24 en casos más graves.
4 Habrá juzgados especializados
"Incorporamos y creamos una red de recursos especializados, los centros de crisis de 24 horas que van a poder acompañar a la víctimas en todas las fases del proceso", explicaba Montero. Además, se implantará una formación en este ámbito para todos los profesionales que estén implicados y vayan a encargarse de cuidar a las mujeres que sufran algún tipo de abuso.
Se crearán juzgados especializados y asistencia jurídica gratuita, también se desarrollarán campañas de publicidad para sensibilizar acerca del tema que estarán dirigidas tanto a hombres como a mujeres con el objetivo de educar a la sociedad en esta cuestión.
