El Consejo de Ministros ha aprobado un decreto-ley para rebajar la mayoría parlamentaria que permite la renovación del consejo de administración de Radio Televisión Española (RTVE), que pasa de los dos tercios en la actualidad a mayoría absoluta.
Las modificaciones que incluye este cambio normativo recogen más poder en la toma de decisiones a la presidencia de la corporación y el número de consejeros, que pasa desde 10 a 15, con mandato de seis años y dedicación exclusiva.
Este decreto debe ser convalidado en un plazo máximo de 30 días en el Congreso de los Diputados a partir de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) este miércoles, 23 de octubre.
Cambios en RTVE
La Corporación, de este modo, se verá sometida a algunos cambios destacados en su cúpula y el funcionamiento de la empresa.
Entre ellos, destaca la composición de mayorías en el consejo de administración. En la actualidad, cinco de los integrantes tienen el mandato caducado desde marzo, así como una vacante del PSOE que no había sido cubierta desde la dimisión de José Manuel Pérez Tornero de la presidencia en septiembre de 2022.
Dada esta situación, el Gobierno ha creído conveniente aprobar este cambio después de no encontrar un acuerdo con el PP para la renovación del consejo de administración durante los últimos meses. Se cambia la norma de 2006, que prevé su elección mediante una mayoría de dos tercios del Congreso de los Diputados, que se verá reducida a mayoría absoluta por la imposibilidad de acuerdo. Es decir, pasará de contar con el apoyo de 234 diputados, a 176.
Se incrementa, además, el número de consejeros actuales y se permite que repitan en el cargo. En la actualidad, hay tres consejeros del PP, tres del PSOE, dos de Unidas Podemos y uno del PNV. La composición pasará desde 10 a 15. Aunque recoge al extinción del mandato de los consejeros cuando se apruebe la renovación, también se contempla que puedan ser reelegidos para un nuevo mandato.
Ese incremento de 10 a 15 miembros permitirá también la entrada de nuevos partidos en el Consejo de Administración, para el que se busca mayor pluralidad. De este modo, partidos como Junts, ERC o EH Bildu podrán formar parte del actual órgano de gobierno. Solo cuatro de los consejeros serán designados en el Senado, donde el PP cuenta con mayoría absoluta, quedando mermada así su capacidad de influencia.
También se impone a los consejeros una dedicación exclusiva a esta labor, que hasta ahora solo se contemplaba a la presidencia. Se aplicará para todos el régimen de incompatibilidades establecido en la legislación mercantil para los administradores, siendo incompatibles con el mandato parlamentario y se someterán al régimen de incompatibilidades de los altos cargos de la Administración General del Estado.
La presidencia amplía sus poderes con esta renovación. Se permitirá nombrar y cesar al equipo directivo, que actualmente cuenta con vacantes en la alta dirección y aprobar algunos tipos de contratos, convenios o acuerdos para el funcionamiento de la corporación.
Además, se incluye una modificación relacionada con el nombramiento de un administrador provisional único. El nuevo decreto-ley habilita que el Gobierno proponga un administrador provisional único en el Congreso de los Diputados, cuando las Cámaras no hayan elegido a los consejeros que le corresponden, o la elección de la persona titular de la presidencia. Dicho administrador provisional estará sometido a una mayoría de dos tercios en primera votación y mayoría absoluta en la segunda. Se contempla un mandato de tres meses prorrogarle cuando no se haya elegido a los consejeros correspondientes o a un titular de la Presidencia.
