La detención del futbolista Rafa Mir, acusado de una presunta agresión sexual a dos mujeres en su domicilio de Valencia, ha copado el foco mediático.
El delantero no había acudido al entrenamiento de este martes, 3 de septiembre, cuando comenzaron a saltar todas las alarmas. Había pasado toda la noche en el calabozo tras su detención, acusado de agresión sexual, y desde entonces se han desvelado todo tipo de detalles sobre el caso.
Las denunciantes conocen a Rafa Mir
Los hechos se remontan al pasado domingo, 1 de septiembre, cuando el futbolista, de 27 años, conoció a dos jóvenes de 21 y 15 años en una discoteca de la ciudad. Todos habían consumido altas dosis de alcohol y después se trasladaron al domicilio del futbolista, en una urbanización de lujo en Béter.
La fiesta continuó en el domicilio del futbolista, donde se habían desplazado los dos hombres (incluido Rafa Mir) y las jóvenes que habían conocido en la discoteca. Después se trasladaron a la piscina de la vivienda donde presuntamente se produjeron los hechos denunciados.
Acusación de agresión sexual
Cuando todos se encontraban ya en la piscina, ambos presuntamente perpetraron la agresión sexual. Una de ellas, de 21 años, acusaba al delantero de una doble agresión sexual en la piscina y en un baño de la casa, y otra de 25, denunció al amigo por propinarle un puñetazo.
La joven de 25 años habría mantenido relaciones consentidas con el atacante, pero su amiga, según publica el diario El Mundo, habría sido agredida en dos ocasiones por Rafa Mir, una de ellas en la piscina. Cuando intentó defenderla, el amigo le propinó un puñetazo en la cara y las expulsó de la vivienda.
Denuncia
Un vecino de la urbanización escuchó entonces ruidos extraños en el domicilio del futbolista y pudo presenciar a dos mujeres jóvenes semidesnudas caminando "desorientadas" por las inmediaciones de la vivienda, según relató el periodista Jorge García Abadía en el programa 'Y ahora Sonsoles'.
Fue este testigo quien finalmente llamó a la Policía Local para denunciar lo que estaba presenciando. Los agentes se personaron después en la vivienda del futbolista, mientras que un familiar de las jóvenes acudió a recogerlas y trasladarlas a un hospital para su exploración. Los investigadores dan credibilidad a sus testimonios y concuerdan con la exploración médica.
Detención
Ante la denuncia presentada en dependencias de la Guardia Cvil, los agentes rápidamente actuaron. El primer detenido fue el amigo del jugador, posteriormente Rafa Mir, que pasó la noche del lunes 2 de septiembre en los calabozos de la Comandancia de Valencia, en Patraix. Los hechos después saltaron a los medios cuando Mir no acudió al entrenamiento durante la siguiente jornada, del martes 3 de septiembre.
Durante su declaración ante la Guardia Civil, Mir y su amigo sostuvieron que las relaciones fueron en todo momento consentidas. Además, la defensa recalca que ambas mujeres acudieron voluntariamente a la casa del futbolista.
El Club se pronuncia
Ante el protagonismo mediático del caso, el Valencia CF se ha pronunciado en un comunicado, en el que se limita a reconocer que admite la situación del futbolista, pero se emplaza al desarrollo de las investigaciones judiciales.
"El club es conocedor de dicha detención y, a falta de detalles sobre la misma, por el momento únicamente puede manifestar que colaborará en todo aquello que la justicia pudiera requerir", ha expresado el conjunto en un escrito.
Rafa Mir era un jugador de refuerzo durante la temporada después de que, por petición del técnico, intentaran incorporarle en verano y después en enero, pero que llegó a buen puerto tras un acuerdo con el Sevilla hasta junio. Mir ha jugado los cuatro partidos de Liga, fue titular antes el Barça, Celta y Athletic, pero partió desde el banquillo en el duelo ante el Villarreal.