La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha presentado durante la sesión de investidura el denominado 'cheque bebé', una ayuda de 14.500 euros por cada hijo para las madres menores de 30 años que lleven más de una década empadronadas en la Comunidad de Madrid.
Es una de las propuestas más destacadas dentro de las medidas que ha presentado la presidenta en funciones durante su discurso. Ayuso asegura que la "protección de la maternidad" será uno de los "ejes" de la legislatura que ahora arranca y que, en esta ocasión, tan solo durará dos años.
La ayuda se compondrá de una subvención de 500 euros al mes desde el quinto mes de embarazo hasta que el pequeño cumpla los dos años. Además, se podrá compatibilizar con los puestos de trabajo siempre y cuando se cobren menos de 30.000 euros anuales.
La partida para la ayuda se compondrá de 250 millones de euros al año, por lo que podrán acceder un total de 14.000 madres, según ha estimado la propia presidenta de la Comunidad de Madrid en funciones, Isabel Díaz Ayuso.
Ayudas hasta 35 años
El plan también incluye ayudas para mujeres embarazadas de hasta 35 años, que tendrán prioridad en la presentación de solicitudes de alquiler de vivienda dentro del Plan Vive. Además, se presentarán bolsas de empleo específicas para madres en situación de desempleo específicas para sus intereses y necesidades, así como planes de formación con soporte educativo en el caso de que vayan a completar sus estudios.
Isabel Díaz Ayuso busca, con este movimiento, que "la región sea conocida como un lugar seguro y privilegiado para que quien quiera formar una familia, quien quiera tener un hijo, no tenga que renunciar a este deseo", ha asegurado.
"Bajada de impuestos y austeridad"
Mientras que presenta esta línea de ayudas, Ayuso prevé cerrar centros de salud este verano, mientras que desde el atril ya ha explicado que su línea de Gobierno se centrará, sobre todo, en dos ejes: "bajada de impuestos y austeridad en el gasto".
La primera medida que ha adoptado en este sentido ha sido la reducción de su propio Ejecutivo. Ha eliminado la vicepresidencia (un cargo que antes ostentaba Ciudadanos) y ha reducido las carteras de 13 a 9, algo que facilita la ausencia de un socio fuerte como los naranjas, con los que casi empataron en las primeras elecciones de 2019.
