La empresa Microsoft ha aprovechado la época navideña para lanzar un anuncio que promueve el respeto y el amor hacia todas las personas, sin importar su raza, religión u orientación sexual. No parece nada descabellado, y más teniendo en cuenta que la Navidad es una época tradicionalmente emotiva, en la que se predica la paz y el amor en el mundo.
El anuncio de Microsoft reúne a un grupo de personas "que están forjando un cambio en el mundo": Jazz Jennings, una de las activistas transexuales más jóvenes del mundo; Zea Bowling, la niña de siete años que se volvió viral al enfrentarse a un predicador homófobo; Mona Haydar, una mujer musulmana que invita a la gente a que le pregunte por su religión y su estilo de vida, o Zianna Oliphant, la niña que pronunció un emotivo discurso contra la brutalidad policial. El mensaje del anuncio es claro: "Cuando el mundo parece dividido, unirnos se convierte en algo maravilloso".
El mensaje de la campaña parece intachable, pero a la organización religiosa 'Catholic League' le ha parecido que Microsoft ha ido demasiado lejos. Bill Donohue, el director de la organización, ha emitido un comunicado explicando todo lo que le parece mal del anuncio.
Pregúntale a cualquier escolar por el significado de la Navidad, y te dirá que celebra el nacimiento de Jesús. Pregunta a los ideólogos de Microsoft, y dirán que significa lo que sea que sus políticas dictaminen. Este año representa la oportunidad de explotar la Navidad imponiendo la ideología LGTB.
Donohue acusa a Microsoft de no mostrar en ningún momento a nadie celebrando la Navidad, y por tanto establece que es un anuncio político. Sin embargo, él es el primero que hace una declaración política al final de su comunicado: "Tantos de nosotros estaremos bailando en las calles el 20 de enero. Cae en viernes, así que apuesto a que el champán no faltará". El 20 de enero de 2017 es la fecha en la que Donald Trump tomará posesión del cargo de presidente de EEUU. ¿Por qué será que no nos extraña que Donohue apoye a Trump?
