A ver, no nos queremos poner intensos, de verdad. Pero creemos que es menester decirle a ese ente abstracto que es la moda, que ya basta de jugar con nuestra salud. Y a quienes os sumáis a ella sin un ápice de crítica, os lo pedimos: ¡Basta! ¡Basta! Estamos seguros de que hablamos por muchas personas cuando gritamos de una manera taxativa y firme: ¡No más enseñar los tobillos en invierno! La última persona célebre en unirse a esta campaña ha sido Ana Rosa Quintana, que ha "reñido" a uno de los reporteros de su programa por hablar del temporal de nieve llevandopuestas unas zapatillas deportivas en medio de la nevada con los tobillos al aire: "¡Cómo no llevas botas!" le decía. Y eso digo yo, hijos míos, eso digo yo.
No nos queremos meter con vosotros y vosotras. Entendemos que las generaciones más veteranas siempre se meten con los jóvenes (y sus modas ya las hemos criticado hasta la saciedad). Ni siquiera nos queremos referir a vosotros como un ente homogéneo, ni de una edad concreta: de verdad, soy millenial, los millenials no hacemos esto, también nos quejamos en grupo de lo de los tobillos. Y os voy a explicar, punto por punto, por qué se debe terminar ya el llevar los tobillos al aire en invierno.
1 No puedes llevar guantes, gorro y una maxibufanda pero ir con los tobillos al aire
Simplemente, es incongruente. Es como pedirte un café con leche desnatada y sacarina, y acompañarlo de un croissant untado en mantequilla y mermelada. Es imposible que tengas frío por el cuello y no en los tobillos. ¿Pero tú has notado el aire gélido en el hueso? ¿Cómo es posible que caminéis así? Pero, simplemente, ¿por qué?
2 Pero, ¿aún no habéis descubierto los calcetines tan bonitos que hay en el mercado?
No hay cosa más bonita que combinar color de calcetines y calzado. Los hay con dibujos, sin dibujos, calentitos, gordos, finos (no, los finos tampoco valen para ahora, así que nada de ponerse medias tobilleras para engañar: ¡LANA!), de rayas, de cuadros... Podéis poner unos calcetines de IronMan si eso os gusta, pero de verdad, los tobillos son todos igual de aburridos.
3 Los calcetines tobilleros se resbalan y escurren, por Dios
Es así. Ya me diréis dónde los compráis, porque en cuanto se dan un poco de sí, acaban a la mitad del puente del pie y eso sí que no lo soporto. Hubo una época en la que me parecían imprescindibles para hacer pilates, no admitía ir con leggins y calcetines largos, pero ¡qué cruz para superar una clase sin que se me cayeran! Vale que los comprara en Carrefour, pero... Es que os miro y tengo que pasarme un rato fijándome a ver si no lleváis pantys encubiertos.
4 ¿Es que ya no se llevan las botas camperas?
Me parece imposible pasar un invierno sin botas camperas. Sí, sí, las botas de cowboy que las chicas llevamos todos los inviernos. Hace casi tres o cuatro inviernos os gastábais 100 euros en unas Hunter para la lluvia y ahora ya ni botines llevamos. Las botas quitan frío, están mejor forradas y cubiertas, tienen suelas de verdad. ¿Qué os pasa?
5 Que metéis el pie en un charco y ya cogéis una pulmonía, hombre ya
O sea, ¿no os llueve encima? Solo de pensar que me esté mojando los tobillos o tintineando en ellos gota de agua, y me pongo de mal humor. Vamos, que seguro que vuestras madres y vuestros padres están con la voz ronca de tanto gritar: "¡Niño, no salgas así que coges una pulmonía!".
6 Ya valió la excusa de que en Primark vienen todos los pantalones cortos...
¡Si los arremangáis hacia arriba! Busca la sección de vaqueros de toda la vida, que en todas las tiendas las hay, o en El Corte Inglés. Que yo conozco ese drama, que en mis pantalones de mujer no me entra el móvil y tengo una guerra abierta contra los fabricantes.
Yo sé que ves a tu padre en traje cuando se sienta con las piernas cruzadas y se levanta el pantalón hasta la espinilla y tú ves unos calcetines ejecutivos eternos, y te baja la moral, pero que en el término medio está la virtud.
7 Yo sé que los jóvenes no cogéis un catarro ni p'atrás
Algo tiene que ver con la adaptación biológica del ser humano a las condiciones climáticas en la transición al cuerpo adulto: los adolescentes no tienen frío, no ponen chaquetas, enseñan los tobillos, las bufandas son sólo para cuando están de moda, y no cogen ni un catarro. Los ves en sudadera en pleno enero yendo al instituto a las 7.30 a.m. y no les pasa nada. Pero, por favor, los que ya habéis terminado la universidad, no, ¿eh? No. Que sí os vais a resfriar.
8 Es una cuestión de salud pública
A ver, quizá exagero si digo que el último resfriado lo cogí después de ver a un chico con un gorro, un plumífero, bufanda y tobillos al aire, pero que me dió un escalofrío, eso sí es verdad. Nos dáis frío. Nos provocáis frío. Yo veo una estufa en la televisión y me da sensación de calorcito. Veo a una chica enseñando los tobillos, y me entra frío. Me tengo que poner una bufanda más. Y cuando pienso en calcetines escurriéndose, se me pone el Trastorno Obsesivo Compulsivo por las nubes. Por favor, por solidaridad, por nuestro ahorro en calefacciones, dejad de darnos frío.
9 Que si véis a gente como Dulceida llevándolos, que es porque están en un país donde es verano
¿Por qué creéis que los influencers viajan tanto? Y que los y las modelos están en un estudio cerradito, con calefacción. Que os engañan. Lo que quieren las marcas, pagadas por los gobiernos, es provocar una nueva gripe española para que quedemos menos personas en la Tierra y acabar con el desempleo y la pobreza. Nadie lo sabe, pero estoy segura de que Jordi Évole está preparando un nuevo 'Salvados' dedicado a esto.
10 Sois capaces de llevar en verano pantalones cortos y calcetines altos
Como hagáis eso, entonces sí que os espera una carta nueva. Y en esa sí que me voy a enfadar. Ahí, sudando toda la pierna.