Macedonia del Norte ha puesto en conocimiento de la Unión Europea la retirada de más de 21 toneladas de carne de cerdo española por estar infectada con peste porcina africana.
La Agencia Alimentaria y Veterinaria de Macedonia ha señalado que todo el cargamento fue intervenido en la frontera con Bulgaria, para evitar así que entrara al mercado. Este organismo también elevará un aviso a la Organización Mundial de Sanidad Animal para adoptar las medidas que se consideren oportunas.
Zoran Atanasov, el director de la agencia, asegura que "la carne confiscada ya no es un riesgo para los ciudadanos", porque no se ha permitido su entrada al país y ya ha sido destruida.
En Macedonia no ha habido casos de infección por peste porcina, pero las autoridades han establecido una iniciativa para reducir el número de jabalíes, ya que hay una superpoblación que se estima una cifra tres veces mayor a la considerada sostenible para el propio país.
Con ello, las autoridades macedonias quieren advertir al resto de países balcánicos para prevenir que la enfermedad se extienda. Ahora falta conocer cuál es el origen exacto de la infección y si hay más cargamentos afectados: la carne procedía de España.
Casos de listeriosis en España
A pesar de que esta vez la carne contaminada ha sido detectada en Macedonia, cabe recordar la última crisis a cuenta de la listeria. Esta bacteria se encontraba presente en los lotes de carne mechada de cerdo de Magrudis que han afectado a más de 150 personas y han causado, al menos, tres muertes.
La listeria es una bacteria que causa trastornos generalmente leves en gente sana, pero que puede agravarse en mujeres embarazadas y personas con el sistema inmunitario debilitado.
El brote de listeriosis, que comenzó el pasado mes de agosto en Andalucía, se llevó consigo la vida de una mujer de 90 años. Actualmente ha habido más víctimas mortales y la listeriosis también ha causado abortos.
El producto causante fue carne mechada comercializada con el nombre 'La Mechá', y al conocer la información las autoridades clausuraron la fábrica (Megrudis, en Sevilla) y analizaron sus productos. Los dueños de la empresa han admitido que sabían que estaban comercializando con carne contaminada desde febrero.
El caso fue llevado a juicio y la juez Pilar Ordoñez ordenó que el gerente y el administrador de la empresa ingresaran en prisión por un delito contra la salud pública, además de tres delitos de homicidio imprudente, dos delitos de lesiones al feto con resultado de aborto y lesiones por imprudencia grave.