VOX ha alcanzado la primera línea política en 2018, tanto en las elecciones como en los medios. Sin embargo, la formación de Abascal lleva en activo desde 2013 y se sabe que ya ha tenido ciertos movimiento polémicos en sus cuentas, como su problema con los décimos de lotería en 2015. Ahora, gracias a fuentes consultadas por El País, se ha podido saber que la campaña de VOX para las europeas de 2014 fue financiada mayoritariamente por seguidores de un partido iraní residentes en otros países.
Partidarios del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán (CNRI) de más de 15 países como Alemania, Italia, Suiza, EEUU o Canadá estuvieron enviado donaciones durante tres meses a las cuentas del partido de ultraderecha. En concreto, hubo 146 donativos que suman un total de 800.000 euros.
El candidato de VOX a las elecciones europeas de 2014 era Alejo Vidal-Quadras, exdirigente del PP y exvicepresidente del Parlamento Europeo. Entonces Santiago Abascal era secretario general y participó en estas elecciones como miembro de la lista.
Los fondos obtenidos por el partido llegaron, según afirman las fuentes, tras la revelación del candidato en su cuenta de Twitter de que aspiraría al escaño en Bruselas bajo la formación de extrema derecha. Por aquel entonces, VOX sólo tenía 3.000 afiliados, pero aún así recibió grandes cantidades de dinero de "algunos donantes económicamente muy potentes", tal y como detallan las fuentes de El País.
La formación de extrema derecha no obtuvo ningún escaño, pues sólo consiguió 244.929 votos, un 1,56% del total. Tras la derrota, Vidal-Quadras abandonó el partido, no sin antes informar a Abascal del origen de la financiación de la campaña.
La procedencia de la financiación
El CNRI lucha por convertirse en una potente fuerza de oposición iraní en el exilio. Por ello, se ha rodeado de figuras políticas potentes y cargos institucionales europeos y estadounidenses. Era considerado un grupo terrorista, pero fue retirado de la lista negra de EEUU y de Bruselas gracias a la campaña de diversos eurodiputados, como el candidato de VOX.
La relación de Alejo Vidal-Quadras con el CNRI era muy estrecha, pues durante su época de vicepresidente del Parlamento Europeo, de 2004 a 2014, participó en diferentes actos de la formación iraní; en 2009 también visitó su cuartel general en Camp Ashraf, a 80 kilómetros de Bagdad, capital de Irak; asistió a más de una decena de mítines anuales en París bajo el lema 'Irán Libre'; escribió varias cartas a los Gobiernos en contra del régimen islámico de Teherán y firmó diferentes declaraciones, junto a otros eurodiputados, suscribiendo las ideas del CNRI.
El exmilitante de VOX, por su parte, cuenta que en 1999 comenzó su relación con el partido iraní cuando recibió la visita de Paulo Casaca, miembro del Partido Socialista en Portugal y presidente del grupo 'Amigos del Irán libre'. "Irán no era una de mis preocupaciones, pero me pidieron que recibiera en Bruselas a la gente del CNRI y lo hice", cuenta Vidal-Quadras. "No conocía nada de los donantes. Eran personas que no tenían nada que ver con VOX. La candidatura era yo. Eran donativos a mi persona. He ayudado a salvar muchas vidas. Es una masa de exiliados que me tiene como un protector. Cuando voy a sus actos, me abrazan, besas y achuchan".
Lo cierto es que estas donaciones fueron responsables de que el partido de extrema derecha contara con una financiación diez veces mayor que la de Podemos por aquel entonces. Sin embargo, no informaron de que el 80% de su campaña estaba financiada por un grupo iraní exiliado. "Nadie nos lo preguntó", se excusa Vidal-Quadras. Por otra parte, un portavoz del grupo iraní afirma que no conocían las ideas de VOX: "Sabíamos que era un partido nuevo, pero no de extrema derecha".
Las visitas a los actos del CNRI se cobraban
Alejo Vidal-Quadras asegura que nunca cobró por participar en los encuentros multitudinarios ni por defender los ideales del grupo iraní. Aclara que, para las visitas anuales a los actos de París, utilizaba una asignación del Parlamento Europeo para costearse los viajes y los hoteles. Por su parte, el CNRI confirma su versión y afirma que no le pagaron.
Aún así, el diario británico The Guardian ya reveló que este grupo iraní sí pagaba "elevadas tarifas" a sus invitados VIP. Cifró en 156.000 euros la cantidad que el asesor de Seguridad Nacional de EEUU, John Bolton, cobró por acudir a estas citas.