Burger King se renueva por completo. La multinacional de comida rápida ha apostado por cambiar su imagen con el objetivo de adaptarse a las nuevas tendencias del mercado, con un rediseño que incluirá un nuevo logotipo, renovación de sus restaurantes y un cambio en el empaquetado de sus alimentos.
El nuevo rediseño rinde homenaje a los 64 años de la marca, con un aspecto renovado pero que emula el antiguo lago que empleó entre los años 1969 y 1999. Una vuelta a la nostalgia que remitirá a muchas infancias, con el que la cadena también espera recolectar con muchos clientes.
La empresa también elimina la curva azul que había empleado desde el año 1999 hasta la actualidad. "El logotipo minimalista se adapta a la perfección a la evolución de la marca", señala la cadena en un comunicado. Las letras se inspiran en su comida, añade, "redondeada, atrevida y deliciosa".
El nuevo logo se irá implementando de manera progresiva en un proceso que se extenderá en el tiempo. Primero llegará a los uniformes de los empleados, además de los envases y campañas publicitarias. Posteriormente, el proceso será más largo hasta que el logotipo llegue a los casi 19.000 restaurantes en todo el mundo para reflejar la nueva apariencia, que llevará varios años.
Un nuevo concepto en restaurantes para modernizar el sector
El cambio no solo será estético, sino que también se prevé renovar todo el concepto del negocio. La compañía también tiene previsto renovar sus propios establecimientos, incluyendo áreas de pedidos móviles y recogida en la acera, zonas de pedidos para autoservicio y sin ascensor, con experiencia mejorada de autoservicio, comedores exteriores y elementos de diseño sostenible.
McDonald's también planea probar un nuevo concepto de restaurante que ofrezca autoservicio, entrega a domicilio y comida para llevar. Con ello, se eliminaría la posibilidad de comer en la sala, reduciendo los metros cuadrados y la inversión.
Además, McDonald's también está apostando por una gran inversión tecnológica para sugerir ofertas personalizadas para los clientes con el objetivo de fidelizar en función de las preferencias personales de cada usuario.