Siri ha demotrado ser una compañera leal desde 2011, cuando aterrizó de la mano del IPhone 4S, hasta el punto de que Apple ya no se entiende sin ella. Sin embargo, a pesar de la amistad que podemos entablar con esta peculiar asistente personal, no deja de ser un programa informático, y, como tal, presenta errores, algunos de ellos bastante graves.
El último, un bug descubierto por la web brasileña Mac Magazine, experta en todo lo relacionado con la compañía fundada por Steve Jobs. Gracias a esta web sabemos que cualquier persona puede pedirle a Siri que lea tus notificaciones con la pantalla bloqueada.
Desde iOS 11 existe la opción de ocultar el contenido de los mensajes que nos llegan con la pantalla de bloqueo del iPhone. De este modo, aparece la notificación del mensaje y la persona que lo ha enviado, pero no el contenido del mismo. Así nadie que no conozca el patrón de desbloqueo de tu móvil podrá leer tus mensajes.
Sin embargo, como ha descubierto Mac Magazine, existe una alternativa que ha pasado por alto Apple para obtener la información privada de otros dispositivos, y es más que sencilla. Únicamente hay que decir "Siri, lee mis notificaciones", y la asistente de voz las recitará una por una. Adiós privacidad.
La compañía ya está al tanto y promete corregir el bug
Ante el revuelo montado, Apple ha reconocido el error en un comunicado oficial, y asegura que están trabajando para eliminarlo próximamente: "Somos conscientes del problema y será tratado en una próxima actualización del software".
De momento, el bug continúa en la versión actual, iOS 11.2.6, así como en la beta de la versión 11.3, que tenían previsto sacar de manera estable la próxima semana. Si finalmente deciden corregir el fallo en la nueva versión, el lanzamiento podría retrasarse unos días.
Mientras Apple se encarga de solucionar el problema, los usuarios pueden evitar cualquier riesgo deshabilitando por completo las notificaciones con la pantalla bloqueada. O también se puede hacer lo propio con Siri. En caso contrario, cualquiera puede utilizar a nuestra amiga para conseguir información privada.