Este otoño se ha detectado el brote más grave de gripe aviar de la historia de Europa. Desde septiembre hasta diciembre de este pasado año se llegaron a sacrificar 50 millones de aves de corral con el objetivo de prevenir la propagación de este virus respiratorio. A pesar de estas medidas, se pudieron observar en las costas gallegas aves marinas, como gaviotas o alcatraces, muertos. Los cadáveres se investigaron y se llegó a la conclusión de que el virus había llegado a estas especies. Sería en octubre cuando se empezó a ver como esta variante había mutado para poder infectar a visones americanos en una granja de A Coruña, donde su mortalidad superaba el 4%.
Este virus, presente en la granja de explotación gallega, es capaz de transmitirse entre mamíferos, aunque no ha llegado a infectar a ningún empleado. Una de las primeras personas en dar la alarma ha sido la viróloga Marion Koopmans, una de las artífices del estudio que determinó el origen del Covid-19, la cual ha advertido a través de sus redes sociales que "estamos jugando con fuego".
La variante de este virus de la gripe aviar A se ha denominado H5N1 y posee una mutación T271A, que se encontró también en la gripe porcina causante de la pandemia de 2009. Asimismo, las investigadoras Montserrat Agüero, del Laboratorio Central de Veterinaria del Ministerio de Agricultura, e Isabelle Monne, del Instituto Zooprofiláctico Experimental de las Venecias, han advertido a través de un estudio que la susceptibilidad de los visones para contraer enfermedades humanas y aviares los convierte en un organismo con la capacidad de "crear" versiones más letales de estos virus.
Desde la Xunta de Galicia se tomó la decisión de sacrificar a los 52.000 visones de la granja el pasado octubre, ya que podía suponer un grave problema para la salud de la población. El salto a humanos de un virus con una alta mortalidad y una rápida tasa de contagio podría ser una catástrofe, como ya advirtió la OMS en el año 2019. "El mundo no está preparado para una pandemia de patógenos respiratorios virulentos y de transmisión veloz", advertía la organización, que detalló que una pandemia como la de 1918 podría dejarnos con 80 millones de muertos.
La viróloga Amelia Nieto, investigadora en el Centro Nacional de Biotecnología, comentaba en una entrevista en 2021 cómo podría afectarnos una gripe letal: "Mi peor pesadilla es un virus de la gripe con una letalidad mayor del 40%: seguramente caeríamos como moscas". Según decía, uno de los causantes de esta letalidad es la proteína H7, presente en la gripe aviar que ha contagiado a los visones, pero que nunca se ha presentado en virus entre humanos. "Solo han sido capaces de transmitirse de aves a humanos con mucha, mucha, mucha dificultad. Pero, cuando lo consiguen, el porcentaje de mortalidad es del orden del 40%-80%", comentaba.
Elisa Pérez, viróloga del Centro de Investigación de Sanidad Animal, ha mostrado su preocupación. "En Europa nunca había habido un brote así en visones, solo había algunos casos descritos en China. Nunca habíamos tenido un susto tan gordo", advertía. Insta a cerrar también todas las granjas de visones, para evitar cualquier brote que llegue a los humanos.
El número de granjas de visones en la Unión Europea ha pasado de 2.900 en el año 2019 hasta las 755 en este 2021. Esta reducción ha venido dada por los cierres masivos ordenados en Dinamarca y Países Bajos. Las restantes las podemos encontrar principalmente en Finlandia, Polonia, Lituania y Grecia. En nuestro país se han implementado medidas de seguridad para evitar cualquier contagio de patógenos.
Transmisión y peligros
La gripe aviar se encuentra en una creciente expansión. La revista Science advirtió la semana pasada que este virus se ha detectado en Sudáfrica. En Perú se encontraron 22.000 aves silvestres muertas en las playas y costas. En la ciudad de Bolívar, en Ecuador, una niña de 9 años fue ingresada por una infección respiratoria grave tras haber estado en contacto con gallinas. La OMS advierte de que la capacidad que posee este virus para transmitirse de animales a personas es "muy preocupante".
En el caso de nuestro país, se encontraron 37 brotes de gripe aviar en varias granjas de aves de corral. A pesar de que en algunos casos llegó a transmitirse a humanos, ninguno desarrolló síntomas.
Si bien es cierto que se trata de un virus letal entre las aves, no supone, en estos momentos, un peligro real para los humanos, aunque el brote entre visones nos debe poner en alerta, por lo que el Ministerio de Sanidad ya ha hecho un llamamiento a "extremar las medidas de precaución".
El hecho que también ha puesto en alerta a la OMS ha sido la carga mutacional que se ha detectado en la granja de visones de A Coruña, lo que nos debe de mantener alerta.
Varios expertos han hablado de este brote, que ha tenido repercusión mundial. Uno de ellos ha sido el director científico de la OMS, Jeremy Farrar, quien ha alertado del riesgo de que un virus de este tipo "infecte a un mamífero intermediario" y que evolucione pudiéndole dar la capacidad de transmitirse "entre mamíferos y humanos", algo altamente peligroso dada nuestra "nula inmunidad". El epidemiólogo Matthew Baylis cree que la cría de visones puede "venir la próxima pandemia", por la oportunidad que supone para el virus para "la transmisión entre mamíferos".