La jornada de elecciones del Reino Unido ha dejado a Boris Johnson más que respaldado, tras lograr conseguir uno de los mayores triunfos electorales de la historia. El Partido Conservador ha superado con creces la mayoría absoluta establecida, que supone 326 diputados en la Cámara de los Comunes. Los tories de Johnson se han hecho con 364 escaños, con los que además han hundido al Partido Laborista.
Together we can get Brexit done. pic.twitter.com/zuWHLJmH3B
— Boris Johnson (@BorisJohnson) December 12, 2019
Johnson siempre lo tuvo claro y lo mostró en su campaña: "Get Brexit Done" (Cumplamos con el Brexit), que ha sido el factor principal para que el partido haya conseguido tan asombrosos resultados. Sin embargo, ha habido un cúmulo de razones que también han propiciado su victoria: los votantes que ya en 2016 respaldaron la salida de la UE, el cansancio acerca del debate que tenía paralizado al Reino Unido o la decepción de la izquierda con la ambigüedad de Jeremy Corbyn.
"Hemos logrado la mayor victoria conservadora desde la década de los ochenta. Con este mandato y esta mayoría, vamos a culminar la tarea del Brexit", ha dicho Johnson esta mañana ante los seguidores que se habían desplazado a la sede del Partido Conservador. Además, ha recibido también la enhorabuena de Donald Trump, que asegura que llegarán a un gran acuerdo comercial tras el Brexit.
Congratulations to Boris Johnson on his great WIN! Britain and the United States will now be free to strike a massive new Trade Deal after BREXIT. This deal has the potential to be far bigger and more lucrative than any deal that could be made with the E.U. Celebrate Boris!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) December 13, 2019
Asimismo, el primer ministro se ha referido a todos los votantes que han decidido apostar por él en estas elecciones. "Acepto vuestra confianza con toda la humildad del mundo, y trabajaré para que nos volváis a votar en el futuro". Con su discurso ha celebrado el triunfo, pero también ha espetado las claves de su próximo Gobierno, incidiendo en la necesidad de dejar atrás la división del país respecto al Brexit y la importancia de mantenerse unidos.
Ha desaparecido ya la oportunidad de un segundo referéndum, por lo que Johnson ha asegurado que Reino Unido dejará la Unión Europea el próximo 31 de enero. "Recuperaremos el control sobre nuestras leyes y nuestras fronteras".
El partido laborista y la resignación de Colbyn
En la otra cara de la moneda está la amargura del Partido Laborista. Especialmente la de su líder, Jeremy Corbyn. Han conseguido poco más de 200 diputados, algo que ha recordado al desastre de Michael Foote en 1983. Tras ello, el líder ha adelantado que no se presentará como candidato en los próximos comicios."Ayudaré a que el partido discuta adecuadamente el proceso que se abrirá a continuación. El Brexit ha polarizado a la sociedad y ha erosionado el resto de asuntos políticos", ha declarado Corbyn.
"Ha sido una noche decepcionante para el Partido Laborista", admitió Corbyn al conocer los resultados. El laborismo lleva ya nueve años intentando reconquistar el poder, y tras una cuarta derrota en elecciones generales el partido parece venirse abajo. La dimisión de Corbyn, además, ha venido ligada a presiones internas tras la catástrofe de la noche electoral. Al líder laborista siempre se le ha reprochado su estrategia ambigua ante el Brexit, ya que incluso llegó a proponer una negociación con la que conseguir una versión más suave que permitiera seguir en la unión aduanera, entre otras cosas.
Sin embargo, la de los laboristas no ha sido la única derrota. El Partido Liberal Demócrata comenzó intentando ser la voz de todos aquellos que quieren seguir en la UE, pero sus resultados apenas han variado teniendo en cuenta las elecciones anteriores. Además, su líder, Jo Swinson, se ha quedado fuera de la Cámara de los Comunes, después de que se derrotara su circunscripción escocesa de Dunbartonshire East.
Por otra parte, el Partido del Brexit del ultranacionalista Nigel Farage se ha quedado fuera del Parlamento después de que Johnson acaparara el mensaje a favor de la huida del Reino Unido de la UE.
No obstante, no todo fueron derrotas: el Partido Nacional Escocés ha arrasado en Escocia y se ha hecho con la mayor parte de sus escaños, más de 50. "Confío en que Boris Johnson, que ha sufrido una severa derrota en Escocia, respete mi mandato", ha dicho la ministra y líder del partido, Nicola Sturgeon. A pesar de ello, el primer ministro ya dejó claro que no pensaba ceder a las pretensiones nacionalistas y no permitiría la celebración de una nueva consulta.