Blanca Paloma se enfrenta por segunda vez al gran escaparate del Benidorm Fest. Estamos en la ciudad alicantina, a tan solo unas horas de la gran final que tendrá lugar en el Palau D'Esports L'Illa de Benidorm, y la expectación es grande, especialmente para ella y su equipo. Intentarán acudir a Liverpool con un tema muy de raíz, 'EAEA', que según algunas voces, podría ser considerado como una fusión moderna de flamenco, donde indiscutiblemente están incluidas la emoción y el virtuosismo propio de la artista.
Hablamos, en medio del frenesí de los ensayos finales, con la artista ilicitana; Jose Pablo Polo, compositor y arreglista de la canción; y Bentor Albelo y Javier Rojo, creadores del concepto escénico que los espectadores pudieron ver en La 1 de Radio Televisión Española el pasado jueves, durante la segunda semifinal, de la que Blanca Paloma resultó ganadora 'por goleada'. Pese al éxito cosechado, la artista y su equipo han querido dar un paso atrás con respecto al feedback: "Me he mantenido al margen de las redes". Aún así, es consciente de las cabalas, que la sitúan como parte de un duelo final, cara a cara, contra Agoney, primer clasificado en la semifinal del martes pasado.
Es bien sabido que los eurofans han apoyado a la cantante desde su incursión en el certamen en su primera edición, en la que se clasificó en cuarto lugar. Ese mismo cariño le llevó a presentar dos de sus temas, 'Plumas de Nacar' y 'EAEA', que llegó tan solo unas horas antes de que cerrara el plazo de inscripción. Su experiencia previa ha sido un gran añadido ya que, según Javi Rojo, del colectivo La Dalia Negra, y creativo del proyecto, "Blanca tiene clarísimo quién es y lo que está haciendo, entonces ya tenemos una base muy fácil con la que trabajar".
Para ella, participar de nuevo en el Benidorm Fest tras su quinto puesto el año pasado con 'Secreto de Agua' supone la oportunidad perfecta para mostrar otra de sus caras artísticas, y ciertamente lo ha conseguido con "una reinvención del folclore tradicional a través de lecciones sencillas". La gran clave en este proyecto, sin duda, es su equipo: "Para mí hacer un trabajo tan colectivo es un éxito. Nos llevamos realmente bien. Espero que sea un equipo para largo plazo y para grandes retos". Más allá de esta oportunidad, tiene claro que lo que persigue es labrar una carrera a largo plazo en la industria, sacar un disco como sueño a cumplir y seguir dando conciertos, que es lo que, en sus palabras, más disfruta.
Un rito auténtico con mucho poder femenino
La autenticidad en Eurovisión es un factor que siempre se premia, al igual que la coherencia escénica con el tema que se interpreta y una serie de elementos que hacen que el espectador no aparte la mirada de la pantalla a lo largo de tres minutos. En este caso, ha optado por un rito de invocación femenina, donde también recuerda a su abuela Carmen. Un camino muy interesante a seguir de cara a una posible representación española en la ciudad británica, donde la delegación española ansia hacerse con el micrófono de cristal tras el éxito de Chanel, objetivo que intentaría acometer con un sello e identidad muy propias de nuestro país.
Muchos han querido trabajar con la alicantina, también ella y su equipo descartaron muchas ideas, como la de introducir una silla en el escenario que simbolizara la presencia de su familiar, pero finalmente ha optado por ir más allá y desarrollar un concepto auténtico a través de su gesto característico, además de otros elementos: "La idea es ser lo más auténtica posible". Podríamos decir que es un concepto milimetrado, muy medido y a medida, en el contexto de un Benidorm Fest que ha recibido ciertas críticas en torno a la realización de las escenografías del resto de participantes, al parecer, por una falta de ensayos técnicos.
"Lo chulo que tiene el Benidorm Fest es que permite dar voz al artista y hacer la propuesta suya", añade la artista. 'EAEA' en escena es como una mini película, un viaje de luces y sombras, de intimidad y de colectividad. Blanca añade que tenían muy claro que el querían que tuviera la identidad de rito y de trance. "A partir de ese concepto fuimos generando los elementos que podían acompañar ese rito", describe, a la par que remarca la importancia la presencia de las cinco mujeres que le acompañan sobre el escenario: "Son fundamentales, su energía es primordial para para esta invocación, para este rito sí han sido escogidas con mucho mimo de todos".
También han ayudado a la artista en esta carrera Paula Quintana, la vestuarista Paola de Diego, y el iluminador Álvaro Guisado. Todos reman a una, pero si hay alguien se sentiría muy orgullosa de Blanca, esa es su hermana Sara Ramos, a quien siempre ha sacado a la luz en cada entrevista que concede: "No quiero pensar en la reacción de mi hermana Sara. Ella es una maestra para mí". Sin embargo, y pese a su condición de favorita se muestra con los pies en la tierra y admite que no da por hecho la victoria: "Puede pasar cualquier cosa. Creo que no hay nada escrito y yo estoy súper orgullosa de hasta donde hemos llegado". "Estaría súper preparada para lo que se venga", concluye, dejando que el público tenga la última palabra.