En plena carrera electoral, el Ayuntamiento de Madrid ha aprobado la gratuidad del servicio público de alquiler de bicicletas, Bicimad, que se extenderá durante un período de más de cuatro meses, del 7 de marzo al 31 de julio. El Consistorio lo justifica en la ampliación del sistema, que se renovará a lo largo de los próximos meses y cuyos primeros aparatos empezarán a llegar a partir del 7 de marzo.
El servicio será completamente gratuito para todos aquellos que deseen beneficiarse de él, tanto abonados como viajeros puntuales. Para garantizar la disponibilidad de bicicletas para todos los usuarios, no se podrá disponer de una bicicleta durante más de 30 minutos continuados. Sí se podrán realizar todos los viajes que se consideren a lo largo del día, pero al terminar los trayectos, habrá que dejar los vehículos en sus bases. Durante este período, los nuevos abonos y renovaciones serán completamente gratuitos.
Bicimad prevé experimentar un crecimiento hasta las 611 estaciones y 7.500 vehículos, desde las 264 paradas y 2.964 bicicletas que cuenta en la actualidad. La medida se ha adoptado después de que Madrid haya conseguido, por primera vez, aprobar los niveles de contaminación y no tener que pagar la multa correspondiente a la Unión Europea y cuando se ha comprobado el éxito en las bajadas de precios en los abonos transporte.
Los viajes gratuitos se extenderán hasta el próximo 31 de julio y no se discriminará entre los modelos de bicicleta antiguos y nuevos, por lo que se podrá utilizar sin problema toda la red, así como las estaciones que se encuentran instaladas en la capital. El cambio tampoco llevará a los usuarios a realizar ningún movimiento, todo será automático.
La ampliación de Bicimad está financiada, en su mayor parte, gracias a los fondos comunitarios Next Generation, que el Estado canaliza a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. De sus 48,8 millones de euros, el Ayuntamiento financia 18,8 y otros 30 se pagan a través de esta herramienta, que también paga obras de renovación de calles en Madrid a las que se añaden carriles bici, entre otras actuaciones.
Bicimad y Fondos Europeos
Este movimiento no deja de lado algunos datos. En primer lugar, que el Ayuntamiento realiza este movimiento en año electoral, cuando Bicimad ha acumulado múltiples críticas por su gestión a lo largo de la legislatura, con más del 30% de sus bicicletas rotas.
Se trata de una sociedad que nació gestionada por el Ayuntamiento de Madrid por decisión de Manuela Carmena. La sociedad nació gestionada, en realidad, por una empresa, Bonopark, cuando fue fundada por Ana Botella, pero las pérdidas que entrañaba finalmente llevó a que fuera municipalizada. Almeida intentó volver a privatizarla, pero finalmente no pudo llevar a cabo tal operación, al menos hasta la fecha, y finalmente ha integrado el servicio en la EMT.
Otro de los datos a tener en cuenta es que esta operación se ha financiado con fondos europeos, los mismos fondos que salieron adelante en el Congreso de los Diputados con el voto en contra del PP (fue VOX quien tuvo que apoyarlos, en un movimiento que generó estupor en todos los círculos políticos).
El propio alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, fue crítico con dichos fondos. En febrero de 2021 viajó a Bruselas representando a los alcaldes del PP para liderar las protestas del municipalismo conservador: "Se está produciendo una distribución arbitraria. Insisto, esto no perjudica al PP, esto perjudica a los españoles. Aquí somos todos iguales ante la ley". Después, renunció a una partida de decenas de millones de euros para reformar el parque de viviendas de la capital y finalmente solo pidió 24 millones de euros en Vivienda sobre una partida de 161.
