Si hace dos días os hubiéramos preguntado por Beth, no hubierais sabido qué contestarnos. Quizás, explicando que Beth fue una concursante de la segunda generación de Operación Triunfo, que posteriormente representó a España en Eurovisión, hubierais podido decir que no sabíais nada de ella desde hace años. Porque Beth desapareció, como otros tantos cantantes han acabado haciendo.
No obstante, si mañana repitiéramos la misma pregunta todos sabríais contestar, explicando la polémica en la que Beth acaba de verse inmersa por ser la imagen de una aplicación llamada CatalApp. Esta aplicación, tal y como se presenta, lo único que pretende hacer es "velar por los derechos de los consumidores y reconocer los establecimientos que actúan responsablemente con la lengua. Los datos de los estudios sobre comercio demuestran que la presencia del catalán aún no ha llegado a unos umbrales de normalidad y esto hace que los consumidores no puedan usar la lengua propia cuando van a comprar o hacer uso de algún servicio. En Barcelona, solo un 56% de los comercios tienen la rotulación informativa en lengua catalana, cuando en nuestro país es un requisito legal".
Es decir, que lo único que la aplicación persigue es que los comercios catalanes rotulen tanto en español como en catalán y que, de esta forma, no olviden que son una Comunidad Autonóma con dos lenguas oficiales. La aplicación ha sido lanzada por la Plataforma per la Llengua, una asociación que lo que busca es mantener el catalán con vida, garantizar que no se pierda el idioma. Para conseguir que los comercios rotulen tanto en español como en catalán, lo que la aplicación permite a los usuarios es ir informando de qué comercios no se encuentran disponibles en catalán. De esta forma, los usuarios podrán valorar "la atención oral, escrita y virtual en función del uso que hacen de la lengua catalana".
Beth, ahora, ha realizado un anuncio promocionando esta aplicación. La cantante ya comenzó a cantar en catalán dos discos atrás, luchando así también por una de sus lenguas oficiales. Y es que no debemos olvidar que, independientemente del enfoque que se le quiera dar a esta aplicación, lo cierto es que lo único que busca es que no se pierda uno de los dos idiomas que Cataluña tiene estipulados como oficiales. El catalán es una historia con una larga historia, igual que el español, y la pérdida de cualquiera de los dos idiomas sería una pena; pero es el catalán el que más riesgo corre, puesto que se habla en un espacio geográfico más reducido.
En Twitter ya se ha desatado la polémica, criticando que Beth publicite esta aplicación. Al parecer, hay quien ve hipócrita que defienda el catalán cuando representó a España en Eurovisión. Mas nada tiene de hipócrita defender un idioma que se siente como propio, y que se ve amenazado, usándose cada vez menos y menos. Habrá quien politice el idioma y vea el catalán como un símbolo de independentismo, pero también hay quien lo siente como algo suyo, una tradición, una herramienta de comunicación.
Como bien han explicado desde la Plataforma per la Llengua, poco tiene esto que ver con ideologías: está relacionado con derechos lingüísticos que se encuentran reconocidos en la legislación, y que deberían ser respetados.