Parece que el caso del "bebé sin rostro" no ha sido el único caso extraño que ha estado bajo la supervisión del obstetra portugués, Artur Carvalho. A pesar de que el médico poseía cinco procesos disciplinarios abiertos, no ha sido hasta el martes 22 de octubre cuando se ha llevado a cabo la primera acción para para apartarle de sus funciones.
El consejo disciplinario del Colegio de Médicos ha decidido suspenderlo durante seis meses, después de evaluar los cinco procesos pendientes. Ha sido a partir del caso del "bebé sin rostro" cuando han empezado a salir otros horrores que corrieron bajo la vista de Carvalho. Rodrigo nació el día 7 de octubre sin ojos, nariz y parte del cráneo, y permanece ingresado en un hospital de Setúbal, a unos 50 kilómetros de Lisboa. A partir de la denuncia presentada por la madre del pequeño, la Fiscalía portuguesa ha abierto una investigación al obstetra.
El caso de Luana y Diana
De esta forma conocíamos el caso de Luana, una niña de 8 años que nació sin barbilla y con las piernas invertidas. Esta podría ser una de las primeras negligencias médicas registradas por el obstetra. También destaca el caso de Diana, que nació en 2016 con dos rectos y dos vaginas. Su madre afirma que se hizo dos ecografías con Carvalho y hasta cinco llegó a hacerse la madre de Luana con el mismo doctor. A pesar de esto, esta última cuenta que el obstetra le afirmaba que "la niña venía perfecta y saludable". Algo que fue muy difícil de entender cuando vio a su hija con los dedos de los pies "pegados" y graves lesiones cerebrales.
Tres días después de su nacimiento, llevaron a la madre a ver a la niña a la incubadora. Tras pedir al resto de padres que salieran de la sala, el padre de la pequeña le preguntó: "¿Estas preparada? ". Cuando la madre vio finalmente a Luana quedó completamente perpleja y atónita.
Debido a que Artur Carvalho tenía hasta cinco denuncias abiertas desde el 2013, el Colegio de Médicos de Portugal ha sido enormemente criticado debido a su falta de respuestas. Algunos medios portugueses incluso afirman que habrían diez procesos en los que estaría involucrado este obstetra, entre ellos el de Luana.
"Es una malformación tan obvia que cualquier clínico formado en ecografía obstétrica no lo puede dejar pasar", declaraba a Efe el presidente de la Sociedad Portuguesa de Obstetricia y Medicina Materno-Fetal, Luís Mendes Graça. Este junto a otros expertos no entiende cómo no se pudo informar a los padres de estas malformaciones en las numerosas ecografías previas.
Tras lo sucedido por el caso de Rodrigo, el Colegio de Médicos ha decidido crear una competencia específica para ecografía en el embarazo. Esta certificará que los profesionales demuestren un currículum suficiente en este campo.