Las icónicas muñecas Barbie son uno de los juguetes más demandados por los más pequeños. Niñas y niños han pasado gran parte de su infancia divirtiéndose con esta muñeca, la más famosa y vendida del mundo. Desde su creación, Bearbie siempre ha representado a una mujer alta, delgada, de melan rubia, ojos azules, cintura de avista y pechos generosos. Un ideal de belleza imposible al que pocas mujeres pueden llegar.
Por suerte, la sociedad avanza y, con ello, la sensibilidad con este tipo de asuntos. Desde el feminismo se reivindican todos los tipos de mujer más allá de la imposible perfección. Así, desde la empresa de juguetes Mattel, han ido introduciendo mayor diversidad en sus muñecas Barbie. Desde diferentes razas hasta con medidas más reales (alta, baja, curvy...), todas ellas con diferentes características pero igualmente bellas.
Durante los últimos años, la empresa ha demostrado su compromiso de empoderar a los niños y las niñas conscientes de la influencia que las icónicas Barbies pueden tener, sobre todo, en ellas. Así, por ejemplo, con motivo del Día Internacional de la Mujer, la empresa lanzó una nueva colección limitada representando a todas esas mujeres que han inspirado con su labor a lo largo de la historia. También aportaron su granito de arena al colectivo LGTB con la primera Barbie lesbiana y incluso mostraron un ejemplo de tolerancia comercializando su primera muñeca con hiyab.
Esta vez, vuelven a dar ejemplo en la industria del juguete lanzando un claro mensaje de inclusión para que todos los niños se sientan representados por la famosa muñeca. En esta ocasión, sumando a la colección dos nuevas Barbies con dos particularidades: una en silla de ruedas y la otra, con una pierna amputada, luce una prótesis.
"Hemos añadido una muñeca en silla de ruedas y otra que representa a aquellos que tienen algún tipo discapacidad física, pues ella tiene una prótesis", ha declarado Kim Culmone, vicepresidenta del departamento de diseño de Mattel a la revista Teen Vogue. "La muñeca en silla de ruedas era una de las más solicitadas por nuestros clientes. Es importante escucharles", ha subrayado.
El proceso de diseño de estas dos nuevas muñecas se ha llevado a cabo con un exhausitivo cuidado y detalle, contando para ello con la colaboración de personas con discapacidad y especialistas de la Universidad de California (UCLA), además de la ayuda de Jordan Reeves, una niña de doce años que tiene una prótesis en uno de su brazos y había solicitado a Mattel en numerosas ocasiones una muñeca como ella. "Contar con Jordan fue muy importante", ha reconocido Culmone, "porque hay cosas que podríamos haber pasado por alto, ha sido esencual contar con alguien que vive esa experiencia a diario".
La importancia de la representación
Resulta de vital importancia, según confirman diversos estudios, que todos los niños y niñas se sientan representados especialmente en los juguetes. A través de los juegos, los menores pueden aprender a aceptarse y aprender valores como el respeto y la diversidad. En el caso de niños con algún tipo de discapacida, esto cobra mayor importancia dado que pueden llegar a sufrir rechazo.
Poco a poco, las marcas de juguetes van avanzando en materia de diversidad. En el caso de Mattel, esta nueva línea de negocio les permite, además, desprenderse de la histórica mala fama de sus Barbies al haber representado ideales imposibles de alcanzar. Con estas nuevas muñecas con diferentes tipos de cuerpo, razas, texturas de cabello, etnias, condición sexual o discapacidad, se va avanzando hacia un mundo mejor o, cuanto menos, más inclusivo.