La FAES de Aznar está realizando todo tipo de carambolas durante los últimos días con el objetivo de ofrecer su batalla particular contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Pero la última no deja a nadie indiferente: comparar a Cayetana Álvarez de Toledo con Arnaldo Otegi para cargar contra la demanda del padre de Pablo Iglesias.
La organización, altavoz mediático del expresidente, ha emitido un comunicado en el que señala que Álvarez de Toledo puede "estar tranquila". Porque las declaraciones de la portavoz del PP, al parecer, se encuentran en el tono del líder de EH Bildu.
"El Tribunal Supremo condenó en su día a Arnaldo Otegi a un año de prisión por injurias a la Corona después de que Otegi dijera del rey don Juan Carlos que era el 'jefe de los torturadores'". Pero, acto seguido, señala que"Otegi recurrió al Tribunal Europeo de Derechos Humanos y en marzo de 2011, la Corte falló que calificar así al jefe del Estado no era injurioso, sino un ejercicio de la libertad de expresión".
Y prosigue:"Es más, el Tribunal de Estrasburgo fijó una indemnización de 20.000 euros a favor de Otegi. Si calificar al Rey de 'jefe de los torturadores' es un comentario simplemente molesto u hostil, como decía la sentencia del TEDH, recordar -sic-que alguien militó en una organización que practicó la violencia terrorista sería, pongamos por caso, un ejemplo del derecho a difundir libremente información veraz".
Cayetana Álvarez de Toledo, en la línea de Otegi
Sin duda, la comparación del gesto de Álvarez de Toledo con Otegi deja a todos estupefactos, pero aún más la justificación que desde el 'think tank' se realiza hacia el acoso que está recibiendo Pablo Iglesias.
A juicio de la Faes de Aznar, Pablo Iglesias es "un tipo creado políticamente en la bronca y el escrache". Una persona antidemocrática: "Sus modelos no pertenecen a la historia de la democracia parlamentaria, sino a los que la han combatido. Como populista agresivo que es, no busca más que la quiebra social, el antagonismo y la demonización de sus adversarios para convertirlos en enemigos. Es la expresión de una práctica de asalto a la democracia y de desestabilización de sus instituciones representativas".
Faes también asegura que el vicepresidente segundo del Gobierno es un hombre "chulesco" al asegurar que el PP promueve la insubordinación de la Guardia Civil, mientras él "ha recorrido las herriko tabernas rindiendo homenaje a ETA y a la denominada izquierda abertzale por ser los primeros en conjurarse para destruir el sistema democrático de la Constitución; él, que elogia a los golpistas catalanes como demócratas y se inventa una teoría conspiratoria contra la derecha".
