Comienza septiembre y con ello arranca el nuevo curso político. Isabel Díaz Ayuso ha vuelto con ganas de sus vacaciones y tras conocerse su intención de ser candidata a a presidir el PP madrileño, la conservadora ha anunciado la que, considera, es una de sus medidas estrella: eliminará todos los tributos propios con los que contaba hasta ahora la región.
A pesar de que los impuestos son un recurso fundamental para sostener unos servicios sociales justos, desde el PP se ha hecho campaña clamando por su bajada o, directamente, por su supresión. Por esta vía ha optado la presidenta de la Comunidad de Madrid convirtiéndose en la "primera comunidad autónoma de régimen común sin tributos propios", según ha anunciado ella misma en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno donde se ha acordado iniciar la tramitación de la Ley de supresión de estos impuestos, que tendrá que ser aprobada posteriormente en la Asamblea de Madrid
Los tributos que quedarán suprimidos cuando se apruebe la ley anunciada son el impuesto sobre la instalación de máquinas en establecimientos de hostelería autorizados, el que pesa sobre depósito de residuos y un tercero de recargo sobre el Impuesto sobre Actividades Económicas. Se tratan de unos impuestos menores por los que el Ejecutivo regional recauda 3,4 millones de euros al año.
Impuestos obsoletos con una recaudación residual
Pese al triunfalismo de Ayuso y lo bien que suena dar la noticia de que se van a bajar impuestos, lo cierto es que los suprimidos eran absolutamente residuales. Según los datos facilitados por el Ejecutivo regional, en la Comunidad de Madrid, la recaudación por estos impuestos apenas supone el 0,02% del total, es decir, 0,7 euros por habitante frente a una recaudación total de 3.415 euros por contribuyente. En 2020, la tributación total por estos impuestos fue de 3,4 millones de euros.
El impuesto sobre las máquinas en locales de hostelería autorizados que grava la instalación de máquinas recreativas, ha quedado obsoleto para la Comunidad de Madrid tras la creación del impuesto estatal sobre el juego. La región era la única comunidad que mantenía un impuesto de estas características, siendo su recaudación residual. Por su parte, el impuesto sobre depósito de residuos, destinado a la protección del medio ambiente, quedará solapado por el impuesto estatal que va a poner en marcha el Gobierno de España. Respecto al Impuesto de Actividades Económicas (IAE), la Comunidad de Madrid cuenta con un recargo del 0% sobre este desde el 2009.