Atacar al Gobierno es la máxima de Isabel Díaz Ayuso. Da igual si para ello hay que instrumentalizar la pandemia o las víctimas que ha dejado. En su estrategia, la presidenta de la Comunidad de Madrid también se permite mentir u ocultar información. Todo vale. Así lo ha vuelto ha demostrar después de culpar al Ejecutivo central de la llegada de la nueva cepa británica a la región a través del aeropuerto de Barajas.
Madrid ha confirmado cuatro casos de esta cepa y tres posibles, lo que ha sido aprovechad por Ayuso para culpar de "irresponsabilidad e inacción" a Pedro Sánchez, y del "coladero de contagios" que, según ella, es el aeropuerto.
"Quiero denunciar la irresponsabilidad de Pedro Sánchez y de su gobierno, que ha permitido durante meses que el aeropuerto de Barajas se convierta en un coladero", ha manifestado. Para ella, no hay suficiente control en el aeropuerto: "No se está actuando seriamente", ha criticado.
Sin embargo, Ayuso ha ocultado que los contagiados con la cepa británica que llegaron a Madrid presentaron en Barajas una PCR negativa. "Los casos que se han estudiado procedentes de Reino Unido venían con una PCR negativa", han reconocido desde el Ejecutivo regional a El Plural.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, ha respondido a la presidenta de la Comunidad de Madrid, pidiéndole que deje de "dividir y crispar" con sus críticas infundadas sobre la falta de control en el aeropuerto de Barajas y, en su lugar, que actúe con "lealtad institucional".
Cuatro casos no graves
Los casos identificados por la Comunidad de Madrid han sido cuatro personas, además de otras tres que son sospechosas y que están siendo monitorizadas. El paciente cero es un joven que habría contagiado a su familia. Ninguno de los cuatro casos detectados reviste gravedad.
El Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso no ha aclarado por qué no comunicó a la opinión pública sus sospechas de que podría haber casos en la Comunidad de Madrid de la cepa británica. Algo que pese a que conocían al menos desde el pasado 23 de diciembre no les llevó a restringir la movilidad en la región ni impedir que los madrileños se desplazaran a otras comunidades autónomas.