Entre las muchas actividades que la Asociación 11M Afectados del Terrorismo lleva a cabo, se encuentra la visita a algunos de los monumentos levantados en honor de las víctimas del atentado o las personas que ayudaron en las labores de rescate y asistencia aquel 11 de marzo de 2004. Pero la comitiva de la entidad desplazada el 25 de mayo de 2019 al municipio madrileño de San Agustín del Guadalix, al norte de la Comunidad, se encontró con una de las sorpresas más "desagradables e inexplicables" en sus dos décadas de trayectoria.
Para Eulogio Paz, presidente de la Asociación, no hay otra forma de describirlo. Al preparar el viaje se percataron de que el memorial "había sido modificado y además no estaba en su lugar inicial" donde se dispuso en 2005, con el socialista Óscar Castillo como regidor. La base de la escultura, donde se encuentra una inscripción que recordaba la tragedia del 11M, estaba oculta y nada visible bajo una nueva placa. El resto de caras del pedestal se había cubierto igualmente utilizando tres placas con las palabras "dignidad, justicia y memoria". Una intervención que tuvo lugar en 2014, con el PP ya al frente del consistorio.
La estatua había sido trasladada además desde el polideportivo municipal a las inmediaciones del cuartel de la Guardia Civil en la localidad. En concreto, se dispuso en la Rotonda a las Víctimas del Terrorismo el año 2018. La última placa incorporada al homenaje, precisamente la que tapa el recuerdo al 11M, enumera a todos los agentes de la Benemérita asesinados en España en la lucha contra cualquier forma de terrorismo.
"Han diluido toda referencia al 11M", opina Paz. "Al esconder la mención a los atentados y rodear el monumento de guiños a la Guardia Civil parece que la escultura también fue creada como homenaje a los fallecidos del cuerpo". El presidente de la entidad, que perdió a su hijo en la masacre, no encuentra motivos "para que se haya hecho esta chapuza en lugar de construir una nueva estatua a los caídos de la Guardia Civil y mantener esta tal como estaba".
La escultura alegórica, obra de Pedro Requejo Novoa, representa una mano que sostiene una manzana, en cuyo interior su vez se encuentra una paloma a punto de echar a volar. En el antebrazo todavía puede leerse el verso "conmigo vais... mi corazón os lleva", aunque para Paz este es paradójicamente "un gran ejemplo de desmemoria".
El monumento fue reinaugurado en octubre de 2014, cuando se consumó la adición de las nuevas placas. La cita estuvo liderada por Figueroa y la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, María del Mar Blanco. La Asociación 11M Afectados del Terrorismo documenta incluso que en el pie de la foto tomada aquella jornada por los servicios fotográficos municipales se habla de "Monumento en Memoria a las Víctimas del Terrorismo inaugurado después del acto", obviando cualquier referencia al 11M y a que ya se instaló seis años antes.
El Ayuntamiento se amparó en "la remodelación urbanística"
La Asociación 11M Afectados del Terrorismo no ha recibido nunca "una respuesta satisfactoria". Después de elevar varias consultas en 2019 al por entonces alcalde, el popular Juan Francisco Figueroa Collado, recibieron esta contestación del primer edil: "El monumento estaba dentro del polideportivo municipal, en un sitio que no era de alta visibilidad, por eso lo situamos en una rotonda, hecha a conciencia para que esté en una de las zonas de más tránsito". El exalcalde añade que se añadió la bandera de España "como perfecta compañera del monumento, simbolizando el apoyo y solidaridad de todos, ya que este ataque también fue a todos los españoles y a su libertad".
En cuanto a las intervenciones en la obra, Figueroa lo explica "como consecuencia de la remodelación urbanística de este espacio donde actualmente se encuentra, poniendo un pedestal con los mensajes memoria, dignidad y justicia y dejando uno de los lados sin cubrir".
Poco tiempo después, lo que quedaba del mensaje original terminó por desaparecer, como el propio Figueroa confesó a la asociación: "Con motivo de la colaboración habitual en actos de Homenaje de la Guardia Civil y a propuesta de sus miembros en Colmenar y San Agustín, surgió la posibilidad de hacer, en la cara de la base libre y respetando al monumento anterior. A su espalda, se erige un monumento en recuerdo a los 248 Guardias Civiles Víctimas del Terrorismo, al encontrarse el Cuartel de Zona casi pegado al monumento".
"Esto pasó el 13 de octubre de 2018", apostillan desde la asociación. Ese día las autoridades locales colocaron en el lado "sin cubrir" una placa con el logo de Covite y la 5ª compañía de la Guardia Civil en Colmenar Viejo, incluyendo los nombres de los 242 guardias civiles fallecidos en acto terrorista. Eulogio Paz señala que además del efecto emocional "es una chapuza artística y monumental, con una placa soldada al pedestal original".
Ejectuadas por la corporación anterior
Desde el actual equipo de Gobierno municipal, al frente del cual sigue el Partido Popular con Roberto Ronda sujetando el bastón de mando desde 2019, apuntan que estas actuaciones "fueron ejecutadas por la corporación anterior". Niegan que el monumento se haya mancillado, aunque en conversación con Somos Madrid no descartan repensar la escultura ante las airadas protestas de la Asociación 11M Afectados del Terrorismo. Tampoco aclaran por el momento si en los últimos cinco años han continuado recibiendo quejas y cómo han respondido a ellas.
En los atentados yihadistas del 11 de marzo de 2004 fueron asesinadas 192 personas y más de 3.000 resultaron heridas. En los ataques falleció un joven de San Agustín del Guadalix, un vecino de apenas 18 años y origen rumano al que la detonación sorprendió en Atocha mientras volvía a casa de trabajar en Alcalá de Henares.