El Ayuntamiento de Madrid ha retirado este martes 29 de marzo la medalla de oro a Vladímir Putin, presidente de la Federación de Rusia, con los votos a favor de todos los grupos del hemiciclo (Partido Popular, PSOE, Ciudadanos y Grupo Mixto) excepto VOX.
El portavoz del partido de ultraderecha, Ortega Smith, ha justificado su decisión argumentando que la medalla no se entregó en su momento al dirigente ruso, sino a su pueblo:"No vamos a estar de acuerdo porque no se le entregó a Putin, se le entregó al pueblo ruso, que no tiene culpa de que se le entregara a un tirano como Putin". Lo cierto es que la medalla de oro fue otorgada a Putin en el año 2006 por el entonces alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón.
La iniciativa para quitarle la llave de la ciudad fue presentada por Más Madrid, principal partido en la oposición. Rita Maestre, su portavoz, ha justificado esta decisión por tratarse de un líder autocrático:"Putin representa todo aquello contra lo que luchamos: un régimen autocrático, criminal y corrupto que comnbate la disidencia y es incapaz de soportar el pluralismo político y mediático y ha puesto la riqueza del país al servicio de un grupo de oligarcas", ha asegurado.
El voto en contra de VOX
Sin embargo, a pesar de la iniciativa, Vox ha decidido desmarcarse y ha votado en contra. Aun así, el portavoz de Vox ha reincidido en que su partido condena rotundamente "la invasión de un tirano comunista", en referencia a Putin.
"Todo nuestro apoyo al pueblo ucraniano, que ha visto socavada su soberanía nacional y sus fronteras, que es lo que nosotros defendemos: una Europa que tiene derecho a defender sus fronteras frente a cualquier invasión o intento de control por organismos supranacionales", ha afirmado Ortega Smith.
Begoña Villacís, vicealcaldesa de Madrid, ha criticado abiertamente esta postura, a quienes ha acusado de cobardes:"La derechita valiente se vuelve cobarde cuando se denuncia a Putin", ha llegado a decir.
