El Ayuntamiento de Madrid, liderado por Manuela Carmena, anunció el pasado 4 de octubre su intención de restringir el acceso a la Gran Vía a partir de las próximas fiestas Navideñas y posteriormente dejarla definitivamente cerrada al tráfico.
Esto, según anunciaron, forma parte de su drástica campaña para reducir los niveles de contaminación que se respiran en la capital debido al incumplimiento por parte del último gobierno de los límites de Bruselas. Ahora, en una rectificación de su comunicado, han decidido cambiar los planes que tenían y han explicado el nuevo proyecto.
El Ayuntamiento ha rectificado
Al final, y definitivamente, el cierre del tráfico a los no residentes en Gran Vía se va a producir en junio, cuando esté lista el Área Central Cero Emisiones. Previamente se pondrá en marcha en Navidad un plan de circulación similar al que se instauró el año pasado.
Justo después empezarán las ampliaciones de las aceras, como es evidente, con los pertinentes y necesarios cortes de circulación, que se anunciarán con el principio de las obras. Según ha comentado José Manuel Calvo:
Se plantea un cierre similar al del año pasado y lo razonable es coordinar esa actuación con las obras en aceras, que comenzarán inmediatamente después
El cierre definitivo del tráfico
Aunque se haya pospuesto, el cierre definitivo del tráfico a los no residentes se producirá en junio de 2018, junto con la puesta en marcha del Área Central Cero Emisiones.
En una rueda de prensa, Calvo ha comentado que el propósito del Ayuntamiento es enlazar el cierre del tráfico de Navidad con las restricciones que conllevaran las obras, algo que conllevará la pérdida de un carril de circulación, también ha insistido en desmentir el bulo de que se trate de una peatonalización total.
Como las obras de las aceras se irán realizando por tramos, las restricciones se irán comunicando a medida que estas avancen, así como también se hará puntualmente con las restricciones de Navidad. Estas medidas están promovidas desde el área de Medio Ambiente y Movilidad, pactada con los comercios y vecinos de la zona.
En cuanto a la duración de las obras de ampliación de aceras, podrían extenderse unos diez meses, es decir, antes de que se acabasen ya se habría puesto en marcha el cierre de tráfico previsto para junio.
Objetivos del nuevo plan de circulación
Los objetivos de esta reducción y limitación del tráfico son evitar aquellos vehículos que solo son "de paso", es decir, que pasan por el centro para ir a otros destinos pero que no se paran ahí e impulsar la movilidad del peaton,la bicicleta y el transporte público.
Los vehículos que sí podrán acceder al Área Central Cero Emisiones, en definitiva, al centro, serán los de los residentes e invitados, propietarios de plazas de aparcamiento y usuarios de aparcamiento de uso público, servicios y transporte público, VTC, motos en horario diurno, vehículos 0 emisiones, vehículos de personas de movilidad reducida y vehículos de transporte.
