La radicalización nunca resulta una respuesta efectiva ante un problema que exige soluciones pacíficas y dialogadas. El aumento de la tensión debido al conflicto existente entre Cataluña y España ha provocado que muchos políticos que no son partidarios de la secesión, ni tan siquiera de votar, se hayan visto insultados, amenazados y vejados a través de las redes sociales y con pintadas en sus barrios o establecimientos comerciales de familiares.
Ahondando más en la cuestión y siendo más precisos, cargos electos del Partido Popular (PP) y Ciudadanos son los que se han visto afectados por estas detestables actitudes por parte de personas anónimas y radicalizadas. Es por ello que el Ministerio del Interior ha decidido aumentar el número de escoltas previa autorización de los damnificados para preservar su integridad física y moral.
Escraches y boicot
Tanto el PP como Ciudadanos han admitido ante los medios que la Secretaría de Estado de Seguridad ha puesto en marcha un protocolo de urgencia para prevenir que estas actitudes de amedrantamiento y amenazas se traduzcan en agresiones físicas hacia los políticos por el simple hecho de tener una ideología y pensamientos diferentes.
Los sucesos de amenazas han ido creciendo exponencialmente durante los últimos meses. Cargos electos de ambas formaciones se han visto insultados y amenazados por diferentes vías. Incluso les han realizado escraches para dejarles en evidencia pública y han lanzado huevos, piedras y pintura a sedes de partidos. Muchas de estas acciones nunca llegan a salir a la luz por deseo expreso de sus víctimas. Sin embargo, no solo los políticos están siendo víctimas de estos comportamientos antidemocráticos.
Uno de los casos que se han hecho públicos son los diferentes escraches que ha soportado Isidro Fainé, el presidente de la Fundación de La Caixa, para que apoye expresamente el referéndum ilegal suspendido por el Tribunal Constitucional y celebrado sin garantías democráticas. Además, aparte del acoso al que se han visto sometido por parte de sectores relacionados con la CUP, grupos organizados han hecho llamadas al boicot de los productos financieros de la entidad. Bajo la etiqueta en Twitter #BoicotLaCaixa, Eulalia Reguant, actual diputada del Parlament y Antonio Baños, ex diputado, se encargaron de promover estas acciones en las redes sociales.
Ciudadanos, no es vuestra tierra ni vuestra lucha
Las víctimas de estos ataques han visto como las acciones violentas se suceden en sus lugares de trabajo, domicilios e incluso establecimientos comerciales de familiares. El caso más mediático lo sufrió el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, al aparecer pintadas en las paredes del comercio de los padres en Granollers. "Ciudadanos, no es vuestra tierra ni vuestra lucha" se podía leer. Rivera ha anunciado que emprenderá medidas legales para perseguir esta purga.
Por su parte, la líder del partido naranja en Cataluña, Inés Arrimadas, ha sido amenazada a través de varias pintadas en el barrio Fontajau de Girona en la calle Valentí Almirall i Llozer que ya se encuentran siendo investigadas por los Mossos d'Esquadra.
No es la primera vez que Arrimadas es insultada y amenazada. A principios de septiembre, la líder denunció a una mujer por pedir una "violación en grupo" para la política debido a que no defendió la celebración de un referéndum en el programa de debate 'Mad in Spain' emitido en Telecinco el domingo 3 de septiembre. En esta ocasión, la indignación social provocó que la empresa Tinsa para la que trabajaba Rosa María Miras Puigpinós la despidiera. La compañía aseguró a través de un comunicado que expresaba "su total repulsa a los inaceptables comentarios manifestados contra Arrimadas", poniendo fin al contrato temporal que tenía.
Piden el regreso de ETA
Tal es la locura como consecuencia del enfrentamiento al que están sometiendo a la población los dirigentes del Gobierno central y la Generalitat que incluso un usuario se atrevió a pedir abiertamente el regreso de ETA para que mate a Xavier García Albiol, presidente del PP en Cataluña, y a su familia. "Habría que matarlo a el y a su familia, que vuelva ETA" le escribió un usuario en Twitter que se hacía llamar Antonio Balaguer Callado.
Mi familia y yo estamos recibiendo varias amenazas de muerte. Las voy a denunciar y pueden tener la seguridad que no me van a callar pic.twitter.com/men7OE0eC6
— Xavier García Albiol (@Albiol_XG) 4 de octubre de 2017
El aumento de los escoltas y de la seguridad a los concejales y diputados autonómicos de Ciudadanos y el PP está siendo llevado a cabo por parte de los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional. Interior ha activado este mecanismo de urgencia basándose en informes que dan veracidad a las denuncias y amenazas por parte de estos radicales independentistas que intentan amedrentar y callar las diferencias ideológicas.
La seguridad también se ha redoblado en los actos políticos para ambos partidos de centro derecha y al PSC. Interior ha informado directamente a muchos cargos públicos sobre la puesta en marcha del plan de vigilancia y seguridad. Sin embargo, algunos de los dirigentes han rechazado las recomendaciones del Ministerio dirigido por Juan Ignacio Zoido. Asimismo, la medida afecta también a cargos políticos que viajan continuamente a Barcelona.
Durante las primeras semanas de septiembre, diferentes alcaldes del PSC denunciaron amenazas e insultos por no ceder los locales para la celebración del referéndum. Estos hechos suponen un aumento de la presión a los políticos basándose en el amedrantamiento que recuerdan a otras etapas oscuras de la historia de España.
