El racismo sigue siendo una de las grandes lacras de nuestra sociedad. Instituciones oficiales e incluso agentes de la policía, que se supone que están para velar por la seguridad de los ciudadanos, tratan con diferencia a las personas en función de su color de piel.
Racismo en la RENFE. Esta vez en la estación de Sants (Barcelona). Un guardia de seguridad empuja y actúa con actitud chulesca y violenta contra un viajero de cercanías. El único al que pidió el billete. #RenfeRacista Así actúa la "seguridad" contra lo cuerpos racializados. pic.twitter.com/WoSteV0EEJ
— Es Racismo (@esracismosos) 14 de febrero de 2019
El transporte público de Renfe quizá sea uno de los lugares donde más se ven estos casos, y no por los pasajeros, sino por los revisores y guardias de seguridad. El 14 de febrero se viralizó en Twitter un nuevo caso de abuso de autoridad con un pasajero negro en la estación de Sants de Barcelona.
La cuenta Es Racismo ha compartido el vídeo donde se ve al agente empujando violentamente al viajero para pedirle su documentación. Este perfil denuncia estos actos en la línea de Cercanías ya que, según apuntan, fue "el único al que pidió el billete".
El agente de seguridad no actúa así por casualidad, es conocedor de la criminalización racial (que contribuye a reforzar) y sabe que en el espacio público puede actuar así sin impedimentos. Suerte que estaba siendo grabado por Ayoub. La policía no es garantía de nada.
— Es Racismo (@esracismosos) 14 de febrero de 2019
El guardia le pide repetidamente la documentación con actitud chulesca y aprovechándose del poder que ostenta dentro del recinto. El pasajero es increpado hasta llegar al exterior donde un Mosso d'Esquadra ve la escena e interviene, en principio apoyando la actitud del guardia de seguridad.
Ayoub, el autor del vídeo que grabó la escena en todo momento, asegura que finalmente dejaron marcharse a la víctima "porque no había cometido ninguna infracción" y acabaron "identificando al guardia de seguridad" por su actitud.
La actitud del mosso que aparece al final es asquerosa. Ya había emitido un juicio antes de saber nada. Nada nuevo para un cuerpo policial que persigue, violenta y encierra a personas que tratan de sobrevivir vendiendo en una manta.
— Es Racismo (@esracismosos) 14 de febrero de 2019
Los guardias de Renfe se creen con autoridad en estos actos
No es la primera vez que se da una discriminación racista en los trenes de Renfe. El 11 de octubre de 2018 se registró una actitud similar en el cercanías de Madrid cuando dos agentes de seguridad entraron en el vagón y se dirigieron únicamente a un joven negro para pedirle el abono.
Bien es cierto que el chico se negó al pensar que los agentes no estaban autorizados para solicitarle la tarjeta y fue cuando actuaron con cierta violencia que generó rechazo incluso a los pasajeros.
Llegaron más compañeros y el joven terminó enseñando el carné, pero le sacaron del tren porque no podían comprobarlo por no llevar la maquinaria necesaria, por lo que demostraron que se excedieron en sus funciones. Redujeron al joven negro e incluso le propinaron una patada. Finalmente el pasajero tuvo que bajarse del tren a pesar de que había pagado su viaje como los demás.