Un gran asteroide de 190 metros de largo se dirige hacia la Tierra, a la que llegará a finales de diciembre de 2021. Si impacta, causaría un daño superior al producido por una bomba atómica, según el rastreador de asteroides de la NASA.
La roca ha sido bautizada como 2018 AH, se estima que tiene unos 190 metros de largo y que pasará por la Tierra el próximo 27 de diciembre. La NASA ya está recopilando todos los datos sobre este elemento para prepararse ante cualquier circunstancia.
Sin embargo, cabe destacar que es poco probable que el asteroide golpee nuestro planeta. La mayoría de las opciones contemplan que pase a una distancia de alrededor 4,5 millones de kilómetros, una doceava parte de la que nos separa de la Luna, situada en 384.000 kilómetros.
De hecho, no es la primera vez que 2018 AH se acerca a nuestro planeta. En 2018, cruzó a una distancia de 296,758 kilómetros, tres cuartas parte de la distancia entre nuestro planeta y la Luna. Pasó desapercibido debido a su penumbra y los científicos apenas pudieron contemplarlo.
Desde entonces, ningún otro asteroide de tal tamaño se ha acercado tanto a la Tierra y no se espera que suceda algo parecido hasta 2028, cuando llegará el enorme 153814 (2001 WN5) de casi un kilómetro de longitud. Aunque tampoco se prevé que golpee nuestro planeta, ya que se espera que pase a una distancia de 249.000 kilómetros, incluso más cerca que 2018 AH.
¿Qué sucedería si un asteroide como 2018 AH impactase contra la Tierra?
En términos generales, resulta difícil adivinar con precisión qué sucedería, ya que el tamaño a menudo varía. La última vez que un gran asteroide golpeó el planeta fue en 2013 en Rusia, cuando un asteroide de 17 metros explotó en la atmósfera.
El último impacto se ha producido en 1908 sobre el río Podkamennaya Tunguska en Rusia, en lo que ahora se conoce como el evento de Tunguska. Se cree que este asteroide tuvo aproximadamente un tamaño similar a 2018 AH, aunque menor.
