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El asombroso sistema del norte de Europa para calentar casas: dirás adiós a los radiadores

Hay multitud de alternativas que permiten calentar nuestros hogares reduciendo los gastos y de una manera más eficiente.

El asombroso sistema del norte de Europa para calentar casas: dirás adiós a los radiadores

El frío y las temperaturas más gélidas siguen azotando nuestro país. Nos encontramos en invierno, una de las épocas con las temperaturas más extremas de todo el año y se nota en la necesidad de calentar nuestras casas, pero también en el bolsillo cuando tenemos que costear estos sistemas de climatización.

A pesar de que surgen multitud de avances que permiten ahorrar aunque sea un poco en la factura de la luz, poco a poco tendremos la capacidad de despedirnos para siempre de los radiadores y decir adiós a uno de los sistemas más tradicionales en nuestras casas.

La solución llega desde Noruega y se trata de las bombas de calor geotérmicas, que tienen como principal atractivo el bajo coste que supone para las familias y la capacidad de proporcionar calor precisamente cuando hace más falta en los hogares.

¿Cómo funciona?

El sistema se basa en sondas geotérmicas, tuberías especiales implantadas a diferentes profundidades en el suelo, que absorben el calor y lo transfieren directamente hacia el interior del domicilio. Se trata de un proceso que se desarrolla por un fluido caloportador, compuesto por agua y anticongelante, que se calienta a su paso por el suelo.

De este modo, el calor recogido se utiliza para vaporizar un líquido refrigerante que, mediante compresión, alcanza temperaturas suficientemente altas para alimentar sistemas de calefacción o producir agua caliente y facilitar la climatización de la casa.

En la actualidad se han desarrollado dos tipos de bombas de calor geotérmicas: agua-agua que explota los acuíferos, y agua subterránea, que aprovecha el calor del suelo. Dependiendo de los recursos locales y necesidades de la vivienda, se elegirá la más adecuada para las necesidades.

¿Qué supone?

La bomba de calor geotérmica tiene como ventaja que funciona de manera eficiente durante todo el año, independientemente de las condiciones climáticas, gracias a la estabilidad de las temperaturas del suelo y el agua subterránea. Además, su alto coeficiente de rendimiento (COP) garantiza un importante ahorro energético respecto a los sistemas tradicionales, convirtiéndose de este modo en una solución ecológica y sostenible.

A pesar de todo, también cuenta con algunos inconvenientes. Su instalación es compleja y costosa, requiere de perforaciones profundas (entre 50 y 150 metros) además de intervenciones invasoras en el terreno y numerosas autorizaciones burocráticas, especialmente en zonas sujetas a restricciones urbanísticas.

A pesar de dichos inconvenientes, los ahorros a fin de mes y su reducido impacto ambiental suponen una buena alternativa al tradicional radiador, conveniente tanto para los hogares como para su instalación en comunidades de vecinos. Aunque no es la única que existe.

¿Qué otras alternativas existen?

Hay que tener en cuenta que en el mercado existen otras alternativas para calentar el hogar. Además de las bombas de calor, encontramos alternativas como la calefacción por suelo radiante o los paneles radiantes, que también cuentan con diferentes características adaptadas a las necesidades de los hogares.

La calefacción por suelo radiante consiste en un complejo sistema de tuberías que se extiende por debajo del suelo y distribuye calor por toda la vivienda. En cambio, los paneles radiantes se colocan en las paredes o en el techo y son una manera también eficiente de calentar los hogares.

Las bombas de calor son una buena opción también para las viviendas, puesto que tienen la capacidad de calentar, enfriar y producir agua caliente sanitaria. Este sistema utiliza energía térmica del aire, el agua o el suelo, garantizando una eficiencia alta y una reducción de las emisiones de CO2.

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