Historias para no dormir. Al menos así se podría describir lo que Jonathan ha contado en el podcast del programa 'Crimen y Castigo' de la COPE. El programa, especializado en los relatos más escalofriantes y temerosos, cuenta la historia de un chico al que estuvieron a punto de quitarle su vivienda en Barcelona. Ahora, en la época estival, es cuando muchas personas abandonan sus hogares y estos quedan desprotegidos. En la mayoría de los casos no existe ningún método de seguridad, más allá de las vueltas que das con tu llave a la cerradura, que prevenga a los ladrones de no acceder a tu vivienda. Por ello, muchos aún lo siguen intentando.
En algunos casos, las historias no tienen el final que estos delincuentes esperan, sin embargo, existen casos en los que salen victoriosos y se llevan el premio gordo. Si bien es difícil dar con un método infalible que no arruine, hay maneras de que al menos puedas identificar si estás a punto de ser víctima de una okupación o un robo.
Jonathan volvió de sus apacibles vacaciones y se encontró la cerradura de su casa en malas condiciones, pues al introducir la llave, esta no giraba correctamente y no le fue fácil entrar. Una vez dentro, se percató de que no tenía agua, al menos no salía agua de ninguna de las salidas que se encuentran en la cocina y el aseo. Descubrió que la llave estaba cerrada y eso solo fueron indicios para reconocer que había alguien siguiendo sus pasos. Posteriormente, se dio cuenta de que había un papel pequeño que alguien había introducido en la cerradura de la puerta y este era la razón principal de su dudoso funcionamiento.
Sin la certeza de conocer de qué se trataba, dos individuos llegaron a su casa y comenzaron a intentar penetrar la puerta de su domicilio. Los vio por la mirilla, aunque inmediatamente comenzó a hacer ruidos que evidenciaran su presencia en el interior de la vivienda, con el objetivo de que se percataran y alejaran. Intentaron manipular su cerradura, aunque la presencia de Jonathan les advirtió de que la casa estaba ya ocupada. Todo quedó en un susto.
Repetidos intentos
Los vecinos de la comunidad ya se habían percatado de que algo estaba ocurriendo en el bloque de viviendas de Jonathan, por lo que no dudaron y decidieron avisar a los servicios de seguridad para denunciar los hechos. La policía informó a las víctimas de que semejantes actos denotaban claramente un intento de robo u okupación, por lo que tendrían que andarse con cuidado. Así es como comprueban si el piso está vacio o no, ya que si al tiempo de instalar el papel o cerrar la llave de paso nadie lo quita o revierte el proceso, les daremos a entender que en la casa está vacía temporalmente.
Si bien es cierto que esto puede ocurrir en cualquier momento del año, en verano es cuando nuestras viviendas son más vulnerables y los casos de robos y okupaciones se disparan. En España, a fecha de julio de 2019, ya se habían contabilizado más de 90.000 sucesos de este calibre y las empresas de seguridad registraron alrededor de un 20% más de llamadas en los días previos a las vacaciones, con el objetivo de contratar un sistema de seguridad que alerte a las fuerzas del orden cuando no nos encontramos cerca de nuestro domicilio particular. Los expertos recomiendan no compartir en redes sociales nuestro viaje, al menos no dar a entender que nos hemos ido y hemos abandonado nuestro hogar.
Otra buena medida que alerte a los ladrones y okupas de que tu casa ya cuenta con inquilinos es la de darles a entender que hay vida en su interior de manera continua: puedes dejar las persianas ligeramente levantadas y solicitar a un vecino que recoja el correo por ti. Una de los procedimientos más eficaces pasaría por instalar un sistema de domótica que simule la vida en el interior de la casa.
Estos métodos se han vuelto tendencia en los últimos años, y aunque su costo es elevado, quizá a la larga no supere el de una alarma de seguridad al uso. Te permite controlar la luz, la temperatura, las persianas e incluso la salida de agua. Las puertas de seguridad antiokupas serán un modo de advertir a los más atrevidos de que tú en su lugar no intentarías ni rozar la cerradura del domicilio, pues será inutil, ya que la única manera de acceder a la casa es a través de radiofrecuencias por control remoto.