James David Russell, de 39 años, fue acusado el pasado mes de septiembre de asesinar a un hombre de 70 años en Idaho (Estados Unidos) y ahora está siendo también investigado por canibalismo, ya que declaró que comerse a su víctima podía "curar su cerebro", según consta en los documentos policiales.
Los fiscales del condado de Bonner tuvieron que modificar la denuncia penal días después cuando las autoridades encontraron el cuerpo de la víctima, David Flaget, maniatado con cinta adhesiva y sin sus genitales en la camioneta del acusado, tal y como recogió Fox News de Bonners Ferry Herald.
Los investigadores incluyeron en su declaración jurada que el acusado podía haberse comido las partes que faltaban en el cuerpo: uno de los testítuclos de Flaget, su pene y una parte del muslo que se extrajo desde su cuerpo.
Antes de ser arrestado, el supuesto asesino huyó de las autoridades y se atrincheró en su garaje. Según declaró el detective del condado de Bonner, Philip Stella, "no fue la escena del crimen más sangrienta, pero es más psicológico, '¿qué diablos está pasando aquí?' y '¿por qué estoy recogiendo pedazos?' Es un camino por el camino oscuro que no vemos muy a menudo", declaró.
El detective también afirmó entonces que "hay muchas facetas que ciertamente nunca conoceremos", en relación con este suceso que ha provocado gran conmoción entre las autoridades y los vecinos de Idaho.
Encontraron tejido del cuerpo de la víctima en la vivienda de Rusell
Los investigadores también entraron a la vivienda de Rusell, con una orden de registro e incautaron un microondas, dentro de un tazón de vidrio con un tejido ensangrentado así como también un cuchillo en la misma situación. La autopsia realizada el 13 de septiembre reveló que el tejido formaba parte del cuerpo.
El detective también explicó que "Flaget tuvo varios enfrentamientos similares a conflictos con Rusell, que contó a su familia". Y añadió: "La familia tenía suficientes señales de advertencia de que el Sr. Russell era un peligro para él o para los demás".
Varios documentos judiciales también explican que en mayo, mientras Rusell estaba recibiendo ayuda en un hospital de California, supuestamente le contó a su familia que quería "cortar trozos de su piel con un cuchillo" para "curar su cerebro".