Al menos cinco personas con alopecia han sido asesinadas durante las útlimas semanas en Mozambique con el fin de extraer sus órganos vitales y realizar rituales mágicos. Las autoridades han señalado la posible causa de este macabro suceso: "Algunos dicen que toda persona con calvicie tiene oro en la cabeza", ha declarado Alfonso Dias en Radio Moçambique.
Los autores de estos crímenes han sido descubiertos cuando intentaban desenterrar el cadáver de otra persona calva con el fin de decapitarlo y abrir el cráneo. Los testigos llamaron inmediatamente a la Policía, que acudió a deternerles.
Ahora las autoridades se encuentran investigando este terrible suceso, y se apunta a que alguno de los curanderos que actúan en la zona centro del país africano, donde ha sucedido todo, puede haber motivado esta cacería indiscriminada contra todas las personas calvas.
Al parecer, algún curandero podría haber incitado a este grupo de personas para que iniciase los asesinatos con el fin de conseguir poderes sobrenaturales, ya que consideran que los hombres sin pelo poseen algunas partes del cuerpo mágicas.
Una práctica habitual
El asesinato indiscriminado de ciertos grupos con el fin de realizar rituales ha sido una práctica constante en el continente. El grupo que ha sufrido en este caso una persecución más flagrante ha sido el de los albinos.
En algunos países existe la creencia de que estas personas poseen partes del cuerpo mágicas capaces de convertir en inmortal a las personas que lo posean. Por ello, se ha generado un negocio, donde algunas personas llegan a pagar 1.800 euros por conseguir una pierna de una persona.
La situación del país y la falta de escrúpulos está llevando a algunas personas a matar albinos con el fin de enriquecerse. José María Márquez, director de África Directo, relata el caso de un niño:
Un niño albino tanzano me dijo que en la época de lluvia no iba al colegio porque los maizales crecen mucho. Si alguien le amputaba un brazo con los maizales altos, iba a morir desangrado sin que nadie le viera
Las campañas de sensibilización se están intensificando para conseguir que la situación cambie, pero con resultados muy diversos. La semana pasada, por ejemplo, un ciudadano intentó matar a su propio hermano albino en la provincia mozambiqueña de Manica.
Una semana antes de ese suceso, un matrimonio fue detenido en la provincia de Tete, en el mismo país africano, acusado de intentar vender a su hijo albino de dos años por cuatro millones de meicais, al cambio, unos 60.000 euros.
Según los datos facilitados por la ONG Under the Same Sun, al menos 166 personas han sido asesinadas y 273 asaltadas durante los últimos años en 25 países africanos distintos.