Varios jóvenes han irrumpido en la casa de Godella (Valencia) donde fueron brutalmente asesinados los pequeños Amiel, de tres años y medio, e Ixchel, de cuatro meses, presuntamente a manos de sus progenitorios. Según recoge el diario La Provincia, la vivienda ha sido asaltada en varias ocasiones con el único objetivo de hacerse selfies.
Individuos desconocidos habrían irrumpido en la parcela al menos en tres ocasiones. Una de esas veces, según señala la Guardia Civil, los asaltantes habrían forzado una ventana para acceder el interior de la casa que los padres de los menores habían okupado, pero después salieron por la puerta.
Se está llervando a cabo una investigación para identificar a los responsables de estos asaltos que traspasaron el perímetro establecido por las autotidades para hacerse fotos tanto junto a la vivienda como en el interior. De acuerdo con el medio anteriormente citado, ya han identificado a varias personas sospechosas y se ha comunicado al Juzgado que instruye el caso.
Problemas psíquicos
¿Que tendría que pasarle por la cabeza a una persona para matar y enterrar a sus propios hijos? Los expertos aún se lo siguen preguntando. El gabinete psiquiátrico de la cárcel de Picassent trabaja para responder a esta incógnita. Mientras tanto, María Gombau ya ha tenido que ser atendida por brotes psicóticos en los que gritaba que quería ver a los pequeños. Por su parte, el esposo y padre de los niños, Gabriel, no parece estar nervioso ante su situación de cautiverio. Sigue afirmando que él no ha matado a los niños.
Los desequilibrios psíquicos parecen ser la principal razón del brutal crimen. La madre de los menores asesinados ha sufrido diversos ataques psicóticos en prisión después de un episodio de amensia en el que aseguró no recordar nada de lo sucedido. Además, Gombau hacía frente a problemas con las drogas, con la esquizofrenia y depresión postparto. En sus últimas declaraciones, la joven ha asegurado que asesinó a los pequeños porque se lo pidió Dios ya que una secta, a a que pertenecía su marido, los vigilaba.