A diario, tenemos que ver en los medios de comunicación una gran cantidad de injusticias, pero la de hoy quizás sea una de las más dolorosas hasta el momento. En Padua, una ciudad italiana, el Tribunal de menores ya ha decidido quitarle la custodia de un niño a su madre porque él es "demasiado afeminado". Según el medio italiano Reppublica, el motivo que se ha dado en el informe de los Servicios Sociales es que el niño es "demasiado afeminado" porque "su mundo afectivo está relacionado casi exclusivamente con figuras femeninas y la relación con su madre está marcada con aspectos de dependencia, con la consecuente dificultad de identificación sexual".
El Tribunal de menores ha señalado también que el niño es "diferente en todos los sentidos, y hace alarde de actitudes afeminadas de forma provocativa". Por supuesto, la familia se ha mostrado totalmente indignada por la decisión, y piensa rebatir la sentencia. La madre se ha declarado dispuesta a luchar por su hijo hasta el final, para así tratar de evitar mediante cualquier método que se lo quiten.
Según el diario 'Mattino di Padova', que fue el primero en dar la noticia, el niño había acudido en algunas ocasiones con los ojos y las uñas pintadas, así como con brillo en el rostro. Ni aún sacado de contexto esto podría considerarse motivo suficiente como para que a una madre le quitaran la custodia de su hijo; si le sumamos el hecho de que la madre ha asegurado que eso sucedió durante Halloween, la decisión es escandalosa. Y así es exactamente como la ve el abogado de la familia, Francesco Miraglia. "Me parece una medida de discriminación pura", ha señalado.
No es la primera vez que este niño tiene que sufrir el proceso de un juicio, con todo lo que ello conlleva, y eso que tiene tan solo trece años. Hace un tiempo, tanto él como su madre denunciaron que su padre había abusado sexualmente de él; no obstante, la sentencia falló a favor del padre. Pese a todo, en la propia sentencia también se señaló que no había "ninguna razón para dudar de los hechos narrados por el niño".
Se ve que no ha tenido suficiente con esa sentencia contraria a lo que él había denunciado; el joven, apenas un adolescente, tendrá que enfrentarse ahora a la separación de su madre porque un tribunal le ha considerado "demasiado afeminado". El abogado de la familia ya ha anunciado que apelará la decisión.