La cantante Ariana Grande se ha mostrado dispuesta a costear todos los funerales de las 22 víctimas mortales que se cobró el atentado perpetrado durante el concierto que la intérprete ofreció en el Manchester Arena, tal y como ha informado su club de fans.
El suceso, que también provocó 59 heridos, ha provocado un profundo malestar en la propia intérprete, que no dudaba en publicar en twitter sus condolencias inmediantamente después de conocerse la tragedia: "Destrozada. Desde el fondo de mi corazón, me encuentro desolada. No tengo palabras en este momento".
La cantante estadounidense no se ha pronunciado sobre la noticia, aunque todo apunta a que ha sido ella misma la que ha tomado la decisión, y que se comprometerá realmente a costear todos los entierros de los fans que murieron tras su concierto a causa de la barbarie terrorista.
Grande no está pasando por su mejor momento y se ha mostrado totalmente conmocionada por tal inesperado suceso. Por todo ello, ha decidido anular toda su gira hasta el próximo 5 de junio, por lo que no actuará en Inglaterra, Polonia, Bélgica, Alemania y Suiza.
La intérprete está necesitando tiempo para recomponerse y ha cancelado su gira como símbolo de respeto hacia todos los fans que murieron por el simple hecho de disfrutar de su música.
Aunque su equipo aún no se ha pronunciado sobre lo que sucederá con sus próximos conciertos, todo apunta a que la cantante retomará el escenario el próximo 7 de junio en París, en otra nación que también ha sufrido en primera persona la barbarie del Daesh.
Además, parece que también actuará el próximo 13 de junio en el Palau Sant Jordi de Barcelona, aunque la organizadora del evento, Life Nation España, aún se encuentra pendiente de recibir la confirmación final sobre el concierto este mismo jueves 25 de mayo por la tarde.
El autor de la barbarie, un joven de 22 años
Mientras la conmoción aún envuelve a todo el Reino Unido, las autoridades ya han identificado al terrorista suicida gracias a que, como en todos los atentados de este tipo, se encargó de que su DNI fuera encontrado por la Policía (los lobos solitarios y los terroristas del Daesh suelen emplear este tipo de artimañas como firma).
El joven había nacido en Inglaterra pero contaba con ascendencia libia, y ha sido identificado con el nombre de Salman Abedi, de tan solo 22 años. Había estudiado en las cercanías de la escuela Whalley Range, el mismo lugar donde habían estudiado Zahra y Salma Halane, otros dos jóvenes que en 2015 habian abandonado su carrera de medicina para unirse al Estado Islámico en Siria.
El joven empleó una bomba de fabricación artesanal y cuidó en todo momento todo el proceso, por lo que parece que contó con algún tipo de formación en esta materia (la policía considera que pertenecía a una célula yihadista que opera en la zona).
Mientras tanto, el padre y el hermano menor del autor de este crimen ya han sido detenidos en Trípoli (Libia), ya que las autoridades del país norteafricano consideran que conocían al detalle todos los planes de su familiar. De hecho, el hermano menor estaba planeando imitar su acción en la capital libia.
