Fatemeh Khishvand, bajo el nombre artistico de Sahar Tabar, es una joven iraní de 19 años cuya imagen dio la vuelta al mundo por la apariencia que mostró a través de sus redes sociales. Se convirtió en un fenómeno viral por, aparentemente, haberse realizado 50 operaciones de cirugía estética para parecerse a su ídolo Angelina Jolie, aunque con un resultado bastante tétrico.
Su imagen se asemejaba a la de una versión zombie de la archiconocida actriz. Poco duró aquel fenómeno, pues pronto se descubrió que todo había sido un montaje orquestado por la joven para ganar popularidad y seguidores en redes sociales.. En realidad no se había sometido a ninguna operación y su peculiar imagen se debía a una mezcla de maquillaje, prótesis de efectos especiales y Photoshop.
Aunque llegó a rozar el medio millón de seguidores, esta idea le salió demasiado cara y acabó siendo detenida y acusada de blasfemia, corrupción de jóvenes, obtención de ingresos por medios inapropiados y falta de respeto a la República Islámica de Irán, por lo que fue encarcelada.
Finalmente, las autoridades iraníes la han condenado a una pena de diez años de prisión, según recoge The Guardian. El abogado de la joven ha anunciado que ha sido absuelta de dos de los cuatro cargos en su contra, pero no ha dado más detalles ya que todavía esperan que pueda llegar un indulto.
Problemas psiquiátricos
Tras su encarcelamiento, Tabar llegó a apelar a la actriz Angelina Jolie para que hiciera campaña por su liberación. "La República Islámica tiene antecedentes de atormentar a las mujeres. Necesitamos estar unidas contra este apartheid de género", clamó. Por otro lado, en primavera, pidió ser liberada argumentando que había contraído Covid-19 en la cárcel.
En octubre de 2019, cuando fue detenida, la televisión estatal iraní emitió unas imágenes en las que Tabar se mostraba arrepentida. Entonces se describió a la joven como "una víctima con una personalidad y un estado mental anormales" que buscaba "vulgaridad" en las redes sociales. Además, existen informes médicos que apuntan a que la joven tiene una enfermedad mental, con antecedentes de visitas a hospitales psiquiátricos.