La traumática salida del PP del expresidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha dejado una herida abierta dentro de la formación regional que todavía continua abierta. Pablo Casado mantuvo abiertas sus esperanzas hasta el último minuto para liderar la lista conservadora hasta que, en una reunión informal, le espetó que iba a sucederle una subordinada con quien había dejado de hablarse, Isabel Díaz Ayuso, representante de la "derecha sin complejos".
Aquí empezó la 'venganza' de Garrido. Durante meses participó en los actos de campaña de los populares y se inscribió en la lista para Europa como número 4. Hasta que un día, Pablo Casado encendió el televisor y se encontró a su díscolo en la sede de Ciudadanos anunciando que se cambiaba de partido 'a la torera'. Como poco tuvo que atragantársele el desayuno.
Ahora, la convivencia de Garrido con sus excompañeros es obligada, puesto que Ciudadanos firmó un acuerdo de coalición con los populares sostenido por VOX en la Asamblea de Madrid. Pero la enemistad sigue. Precisamente, el cargo de Garrido sirve como excusa para que el PP nombre de jefe de gabinete a Miguel Ángel Rodríguez, conocido por llamar "mierda" a Garrido en Twitter y denunciar los supuestos chanchullos del padre del líder naranja en Madrid, Ignacio Aguado, con contratos públicos. Unos tuits que han abierto una brecha con una suerte de guerra fría dentro del propio ejecutivo madrileño (qué conveniente hubiera sido apoyar a Ángel Gabilondo, pensará ahora Aguado).
El hecho de que PP y Cs formen gobierno de coalición en Madrid no impide que ambos se tiren los trastos en público. El último en hacerlo ha sido el propio Ángel Garrido, que no ha dudado en criticar toda la estrategia que está desarrollando el PP desde que Pablo Casado triunfó en las primarias.
"El monstruo de VOX"
A Ángel Garrido no le gusta la ultraderecha VOX, a pesar de que ha optado por una fórmula parlamentaria que obliga a entenderse con Rocío Monasterio. Eso es lo que queda palpable en la entrevista que Garrido, actual consejero de Transportes, ha concedido al diario El País.
"Tengo que decir algo: VOX existe como existe ahora mismo porque lo revivió el PP, cuando VOX no tenía ningún concejal, ningún diputado, era un partido absolutamente residual. Y quien empieza a hablar de VOX es el propio PP, que decía que había que rescatar ese voto, que era absolutamente insignificante. Y le puso otra vez en escena. A veces, los monstruos los despertamos nosotros mismos: en el caso de VOX, claramente lo despertó el PP", ha asegurado el expresidente regional.
Garrido considera que el partido que le aupó como vicepresidente con Cristina Cifuentes ha cambiado por completo con Isabel Díaz Ayuso. Y que esto está pasando factura electoral: "No hay que cambiar el perfil ideológico de un partido casi de la noche a la mañana, con un movimiento táctico. Ni siquiera estratégico. Táctico. Y dio muy malos resultados".
Estos giros hacia la derecha, según Garrido, fueron el detonante de su marcha: "Me di cuenta de que no podía seguir aplaudiendo eso. Lo digo en el sentido literal y en el figurado. No podía seguir yendo a mítines a aplaudir las cosas que se estaban diciendo y ese acercamiento clarísimo que había a VOX".
El expresidente de la región asegura que sus enemistades con Ayuso no son personales, aunque haya quien lo pone en duda aludiendo a una relación estrecha entre ambos en el pasado.
"Pin neandertal"
Garrido también ha negado la convenciencia de la censura parental que VOX quiere imponer en las escuelas, aunque su Gobierno tiene la intención de implementar una medida preventiva, de manera que los padres puedan vetar un colegio en función de las materias curriculares.
"Cs jamás va a ceder a pretensiones de la naturaleza del llamdo pin parental. Primero, porque ese problema no existe en la Comunidad de Madrid. No hay una sola denuncia sobre adoctrinamiento en las aulas. Segundo, porque viewndo la intervención del consejal de VOX en el Ayuntamiento de Madrid, llena de majaderías y de odio, se ve realmente que el pin parental es un pin neandertal". Garrido hace referencia a Pedro Fernández, el edil de VOX que habló de "enfermos" en relación a la homosexualidad.
Hoy un concejal de Vox hablando sobre homosexualidad acaba de decir en el Ayuntamiento de Madrid "pierda toda esperanza en convertir a mis hijos en enfermos como ustedes" #Ascazopic.twitter.com/vtETvMfXTL
— Igualdad LGBT ?????????? (@IgualdadLGBT) January 28, 2020
A pesar de todo, Ángel Garrido niega que los acuerdos firmados a la derecha de Ciudadanos hayan supuesto un error: "La mejor opción que teníamos era gobernar con el PP. La Comunidad sigue siendo el motor económico de España por las políticas liberales y unirse al PSOE en ese momento era renunciar a todo eso".