Los rumores en torno al interés de Jeff Bezos por comprar la red de supermercados DIA suenan poco a poco con mayor fuerza. La compañía de distribución online ya no oculta su determinación por instalar tiendas físicas en el Viejo Continente y los establecimientos de la firma española son su principal diana.
El período de Ricardo Currás como consejero delegado ha supuesto una fuerte caída en bolsa. De hecho, su sustitución por Antonio Coto supuso una fuerte subida en los mercados, en los que había perdido nada menos que un 50% de su valor en lo que llevamos de 2018.
Su actual valor se sitúa en 1.300 millones de euros. Una auténtica ganga para Bezos, que obtendría control sobre 5.498 establecimientos en Europa (España y Portugal) y otros 1.922 en Latinoamérica (Argentina y Brasil); además de una capitalización de 2,680 millones. Además, la sede de los supermercados se encuentra en Madrid, donde Amazon ya ha instalado su sede de operaciones en Europa. Por tanto, la capital española se convertiría en la gran sede de sus negocios en el Viejo Continente.
Por otro lado, España representa todo un nicho de mercado muy interesante. Primero, porque DIA continua como tercera firma en su sector, con una cuota del 8,2% (solo superada por Carrefour -8,7%- y la insuperable enseña de Juan Roig, Mercadona, con un 24%). Por otro lado, porque nuestro país aún se encuentra a la cola en comercio electrónico, por lo que las posibilidades de ganar cuota son especialmente altas.
Amazon ya se encarga de la venta online de DIA
La enseña de Jeff Bezos ya conoce DIA sobradamente. En septiembre de 2016 firmó un acuerdo con los supermercados españoles para impulsar la venta de alimentación online. Gracias a ello, los clientes de Prime en Madrid y Barcelona pueden comprar por internet los productos de alimentación de La Plaza.
Este punto, además, no es baladí. La larga lista de acuerdos con distribuidores para producir su marca blanca ya están firmados, por lo que Amazon también contaría con una marca de distribuidor consolidada y llegaría, en definitiva, 'con el trabajo hecho'.
Supermercados autónomos
Junto al lanzamiento de su supermercado online, Amazon tiene un experimento de supermercado autónomo lanzado en Seattle el pasado mes de enero de 2018 y que podría exportarse a España, Portugal y Latinoamérica de manera inmediata.
En sus establecimientos, tenemos que utilizar un código QR al entrar en la tienda. Después, accederemos y seremos controlados por una cámara que, según confiesan desde la propia empresa, monotorizará nuestros pasos. Con ello, será capaz de reconocer qué estamos cogiendo de una estantería y lo añade a su carrito virtual. Si lo devolvemos, se eliminará automáticamente. Si detecta que salimos del establecimiento con él, se cobrará automáticamente a nuestra cuenta sin tener que hacer nada más.
Quizás pueda tratarse de un guiño: el lanzamiento de Amazon Go, como se llama su tienda de Seattle, se produjo prácticamente de manera paralela al de DIA Go, una red de establecimientos de conveniencia ideados para el centro de las grandes ciudades y con un modelo arquitectónico muy parecido al impulsado por Bezos.
Con un mercado que aún no ha alcanzado su madurez, España es territorio virgen para conseguir una fácil consolidación y un termómetro para instalarse definitivamente en Europa.
La pelea con Fridman
Los rumores sobre la OPA de Jeff Bezos se producen de manera paralela a la de la posible compra por parte del inversor ruso Mikhail Fridman. Él cuenta, aparentemente, con la delantera, ya que tiene el 25% de sus acciones a través de su vehículo inversor Letterone Ivestment.
Sin embargo, la capacidad económica de Amazon y su control del sector online atraen de manera especial al resto del accionariado, conformado especialmente por fondos de inversión (Goldman Sachs, Baillie Grifford & Co. y Norges Bank), a quienes solo interesa la rentabilidad, en ningún caso permanecer en el accionariado y la posibilidad de vender con beneficios con la mayor rapidez posible.
Consciente de ello, quizás, Fridman ya ha anunciado que no peleará con la firma estadounidense: "Si la quieren, es suya", llegó a espetar a su entorno. Mientras tanto, los rumores crecen y se fortalecen a medida que pasa el tiempo.