La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, ha lanzado una alerta tras confirmar 79 casos de linfoma anaplásico de células grandes (LACG) en mujeres que habían recibido implantes mamarios en España. La autoridad sanitaria ha revisado 112 casos sospechosos en nuestro país hasta 2022.
Ese es el aviso que lanza la AEMPS en el informe de seguimiento a partir de la evaluación de las notificaciones recibidas en el Área de Vigilancia de Productos Sanitarios, donde destaca que la mayor parte de los casos tuvo un desarrollo benigno tras la retirada de los implantes. Sin embargo, en algunos casos se necesitó tratamiento específico para linfoma.
Además, se han registrado cuatro muertes. Las mujeres afectadas sufren un subtipo de linfoma, denominado 'linfoma no Hodkin', que afecta al sistema inmune y una gran variedad de tejidos, incluyendo la mama. Un pequeño porcentaje de mujeres han visto cómo dichos tumores aparecían en las cicatrices formadas alrededor de sus implantes.
La AEMPS sostiene que la mayoría de las mujeres que padecen este linfoma se implantaron las prótesis con una finalidad estética. Madrid es la comunidad que registra más casos, con 17 casos sospechosos de los 28, mientras que Cataluña y Comunidad Valenciana tienen ambas una docena.
Un riesgo de cáncer
El riesgo de desarrollar cáncer por implantes mamarios aparece en una revisión de 2018 realizada en Países Bajos. Se contabiliza en 1 por cada 35.000 mujeres con implantes a los 50 años, 1 por cada 12.000 a los 70 años y 1 por cada 7.000 a los 75 años.
Los implantes texturizados serían los más proclives a desarrollar este tipo de tumoracxón, que representa el 82% de los implantes afectados por esta enfermedad. El riesgo es bajo, pero se aconseja barajar la intervención cuando se realiza únicamente por una cuestión estética. Además, se considera necesario informar a los pacientes sobre los riesgos que entraña y cómo reconocer la enfermedad.
