El Sistema de Alerta Rápida por Alimentos y Piensos (RASFF) ha emitido una alerta alimentaria tras detectar la presencia de ocratoxina A en higo secos y ají panca en polvo. Se trata de una microtoxina que puede producir efectos adversos en la salud y se vincula a diversos riesgos en el organismo, según la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer.
La ocratoxina A ha sido detectada en un cargamento de higos secos procedentes de Turquía. Los productos, que estaban destinados para España, se analizaron y detuvieron en la aduana. Los niveles de toxina detectados superaron casi tres veces los límites establecidos por la normativa europea.
La alerta se extiende al ají panca en polvo, producto originario de Perú. Los análisis detectaron niveles altos de ocratoxina A que duplicaron los valores permitidos. El ají panca se distribuyó en varios países europeos, incluida España, Francia, Bélgica, Alemania, Hungría y Reino Unido.
Retirada del mercado
Con motivo de esta alerta, las autoridades de España y Francia han ordenado la retirada inmediata de todos los productos afectados e implementarán medidas para asegurarse de su correcta salida del mercado. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha colaborado en todo momento con aduanas para asegurar el cumplimiento de la norma. Una iniciativa que también ha llevado a cabo Francia.
La ocratoxina A es una toxina que puede contaminar alimentos como cereales, frutos secos y especias bajo condiciones de almacenamiento inadecuadas. Se trata de una sustancia que puede afectar a los riñones y el sistema inmunológico.
Las autoridades sanitarias europeas han recomendado a los consumidores revisar y evitar el consumo de productos que puedan estar contaminados. El control en aduanas ha evitado que los higos secos procedentes de Turquía ingresaran en el mercado español y ha demostrado la efectividad de las medidas de vigilancia.