El hongo reishi (Ganoderma lucidum) o Ling Zhi, por su nombre en chino, es una seta relacionada con la medicina tradicional que se ha popularizado en establecimientos especializados por sus presuntas características anticancerígenas, antitumorales y antivíricas. Propiedades que, sin embargo, no están avaladas por la ciencia, mientras que sus efectos negativos sí lo están.
Así lo advierte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en un informe que ha difundido recientemente. Se trata de un hongo que se puede comprar en tiendas de dietética secado o en polvo para preparar infusiones o añadir a batidos, yogures o bebidas vegetales. Además, se puede adquirir como suplemento en cápsulas o pastillas.
Más del 90% de su composición está formada por fibra no digerible y tiene una textura muy parecida a la madera. Este denominado como 'hongo de la inmortalidad' o 'seta de la esperanza' sea recomendado como tratamiento de patologías, desde las más leves como el herpes labial a las enfermedades más graves, como el cáncer o el alzhéimer, siempre sin aval médico.
El hongo reishi tiene compuestos nutricionales que sí son potencialmente positivos. Por ejemplo, es altamente antioxidante, con una composición a base de triterpenos, ácidos -con actividad antihipertensiva, antihistamínica, hipocolesterolemiante, protectora del hígado y antiagregante plaquetaria-, minerales, vitaminas del grupo B -sobre todo ácido fólico-, estercoles, alcaloides, polisacáridos. Al consumirlo, además, aporta "todos los aminoácidos esenciales".
Sin embargo, este hecho no implica que se haya demostrado su efectividad frente a las enfermedades. La OCU advierte que "la Natural Medicines Comprehensive Database, la base de datos de medicamentos naturales, clasifica la eficacia de estos basada en la evidencia científica y los beneficios del reishi observan una clasificación de 'posiblemente ineficaz' para disminuir el colesterol u otras grasas de la sangre en personas con colesterol, diabetes o presión arterial alta".
Además, cuenta con insuficiente evidencia para determinar su acción positiva en enfermos con Alzheimer y diabéticos. Sí se habría observado que tiene "un efecto real reduciendo los efectos secundarios de los tratamientos contra el cáncer", pero la Organización advierte que "los mecanismos de acción del reishi siguen siendo desconocidos y su efecto es inespecífico", por lo que instan a esperar a una mayor investigación.
No es inocuo
En cualquier caso, lo importante en este caso es resaltar que el consumo de este hongo no resulta inocuo y puede provocar graves problemas de salud. "El hongo reishi puede causar mareos, sequedad de boca, picazón, náuseas, malestar estomacal y sarpullido. No hay suficiente información para confirmar que su consumo es seguro durante el embarazo o la lactancia, por lo que se recomienda evitarlo. Las dosis altas de hongo reishi pueden aumentar el riesgo de hemorragia. Si te vas a operar, se recomienda dejar de consumirlo al menos 2 semanas antes de la intervención", explica.
Además, no se recomienda mezclarlo con "productos naturales para reducir el azúcar en sangre (como el aloe, canela casta, cromo y nopal), con suplementos que reduzcan la presión arterial (como los que incluyen pépticos de cafeína, L-arginina, niacina u ortiga) o con los que puedan retardar la coagulación sanguínea (que incluyen ajo, jengibre, ginkgo y Panax ginseng)".
Finalmente, están contraindicados cuando se están tomando los siguientes medicamentos: "Fármacos contra la diabetes, reduciendo en exceso los niveles de azúcar en sangre; Antihipertensivos: el hongo podría reducir la presión arterial y si se combina su ingesta con medicamentos hipertensos puede hacer que baje demasiado; Anticoagulantes o antiplaquetarios: el reishi podría retardar la coagulación sanguínea y combinado con estos fármacos podría aumentar el riesgo de hematomas y hemorragias".
