Se ha emitido una nueva alerta alimentaria por parte de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) debido a la detección de Salmonella en carpaccio de origen español.
La notificación proviene de las autoridades sanitarias de Cataluña a través del Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (SCIRI).
Se insta a la retirada del producto afectado y se advierte a la población que posea dicho lote de carpaccio que se abstenga de consumirlo. Aunque la distribución inicial se ha registrado en la comunidad autónoma de Cataluña, se alerta sobre la posibilidad de que haya habido redistribuciones a otras regiones.
Datos del producto
?? Alerta por presencia de Salmonella en carpaccio.
— AESAN (@AESAN_gob_es) May 31, 2024
???? No consumir
?? Nombre: Carpaccio con queso Parmigiano Reggiano y salsa
?? Marca: Roler Gran Selección
?? Número de lote: 224124
????https://t.co/FU4ksiljlD pic.twitter.com/htqh7jYca6
¿Qué es la salmonella?
La Salmonella es una bacteria que puede hallarse en diversos alimentos, como carnes de pollo y cerdo, huevos, frutas, vegetales e incluso en productos procesados. Algunas personas tienen mayor susceptibilidad que otras a contraer una infección y enfermar gravemente.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), por lo general, los alimentos contaminados con Salmonella u otros microorganismos perjudiciales no presentan alteraciones en su apariencia, sabor u olor. No obstante, los alimentos no son la única fuente de propagación de Salmonella a las personas.
Las bacterias también pueden diseminarse a través de agua contaminada, el entorno, otras personas y animales. Incluso las mascotas y los animales en zoológicos interactivos, granjas, ferias, así como en escuelas y guarderías infantiles, pueden ser portadores de Salmonella y otros microorganismos dañinos.
Ciertas personas tienen un mayor riesgo de sufrir una infección grave por Salmonella. Este grupo incluye a niños menores de 5 años, adultos de 65 años o más, y personas cuyo sistema inmunológico está debilitado debido a condiciones como diabetes, enfermedad hepática, renal o cáncer, así como por tratamientos específicos.