La dirección actual de Ciudadanos se encuentra completamente en entredicho. El liderazgo de Albert Rivera pende actualmente de un hilo como consecuencia de la arriesgada apuesta por sustituir al PP por la derecha y la debacle electoral que plantean todos los sondeos para los próximos comicios del 10-N. Además, el partido está registrando una fuerte bajada de afiliados y no llena los mítines como antes.
En este contexto, surge un nombre al que todos miran con recelo: Toni Roldán. La persona que ejerció como secretario de programas del partido y dimitió por sus diferencias con Rivera ahora podría erigirse como la persona que podría hacer tambalear el liderazgo quien fue su jefe en el partido.
Los temores, sin duda, son muy fundados. Primero, porque la dimisión de Roldán no ha impedido que permanezca registrado como militante y pague religiosamente sus cuotas como afiliado. Son dos condiciones imprescindibles para presentarse a un proceso de primarias en el partido, tal y como recogen sus estatutos.
Además, es de sobra conocido que Roldán participa frecuentemente en reuniones con otros miembros destacados que han desertado de las filas de Rivera. Entre ellos, destaca especialmente el excandidato del partido a la Alcaldía de Barcelona, Manuel Valls, que fue expulsado por apoyar la investidura de Ada Colau para evitar un Ayuntamiento dirigido por los independentistas. La última pulla a Rivera ha llegado en forma de tuit apelando al mitin que ha pronunciado el líder naranja, que ha prometido encarcelar a políticos independentistas frente a la sede de la Generalitat.
He vuelto a BCN para defender la Constitución del 78, la unidad de España y luchar contra el nacionalismo..pero no es un presidente del gobierno el que mete a unos o otros en la carcel ..es la justicia independiente de un Estado de derecho con separación de poderes que lo decide. https://t.co/6TbOeL3Qpt
— Manuel Valls (@manuelvalls) October 20, 2019
También aparecen Javier Nart (diputado en el Parlamento Europeo y también expulsado del partido) o Francisco de la Torre (personalmente enfrentado con Rivera y muy lejano a la política neoliberal que defiende Marcos de Quinto). También Francesc de Carreras, uno de los fundadores e ideólogos del partido que abandonó tras conocer la negativa a investir a Pedro Sánchez.
Todos los disidentes se han mantenido muy activos durante los últimos meses
Los disidentes de Rivera no se han mantenido al margen y están marcando posiciones. Por ejemplo, Manuel Valls critica abiertamente la defensa del 155 que hace constantemente Rivera: "Proponer hoy la aplicación del 155 no tiene sentido. Sabemos todos en qué circunstancias tendría que aplciarse. No jugamos con eso", ha manifestado.
Valls ha iniciado todo un periplo durante este verano que se ha mantenido ajeno a la agenda mediática. Los últimos meses han sido el marco de varios encuentros con Toni Roldán (exsecretario de programas) y Francesc de Carreras (uno de los fundadores e ideólogos del partido que abandonó tras conocer la negativa a investir a Pedro Sánchez).
A ellos se suma Francisco de la Torre, antiguo miembro de la Ejecutiva y del Equipo Económico del partido y hoy personalmente enfrentado con Albert Rivera en todo un cruce de reproches personales. En cuestiones políticas, De la Torre difiere de la política neoliberal de Marcos de Quinto y apuesta por una visión más socialdemócrata de la economía.
Todos ellos han mantenido un perfil público determinado, ya sea a través de redes sociales o conferencias. En una de ellas, Francesc De Carreras tuvo la oportunidad recientemente de participar en compañía de otros intelectuales de Ciudadanos como Fernando Savater.
Otra de las personas que quiere mover ficha (y esta vez dentro del partido) es Juan Carlos Bermejo, que se ha mostrado claro en declaraciones a El Plural: "Si el 10 de noviembre Ciudadanos pierde votantes y no consigue superar al Partido Popular, Albert Rivera debe dimitir".
Bermejo representa todas las críticas al "excesivo presidencialismo" con el que se dirige actualmente el partido, según los adversarios de Rivera. Él fue el encargado de denunciar un supuesto 'pucherazo' en las primarias madrileñas que finalmente dieron el visto bueno al actual vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado. Unas críticas similares a las de Castilla y León, donde Silvia Clemente tuvo que dimitir tras revelarse la manipulación de los votos para designarla candidata (ha sido sustituida por un hombre enfrentado a la cúpula, su rival Francisco Igea).
Bermejo ha asegurado que emprenderá una campaña para desbancar al líder, que estaría afrontando su quinta candidatura nacional en el caso de repetir elecciones en otra ocasión: "Esa misma noche, la del 10 de noviembre, si Albert Rivera fracasa, yo mismo me moveré por toda España para recabar un tercio de las firmas de los afiliados para convocar una Asamblea General y nombrar un nuevo Comité Ejecutivo", ha avisado.
