Desde 2018, en España se oye eso de 'Agoney a Eurovisión' en más de una ocasión. El canario nunca ha ocultado (con sus idas y venidas como todo el mundo) que el festival le atrae, y su perfil, por registro vocal, es inigualable para muchos para representar a España en el festival. En 2018, caerse un poco antes de la final de 'Operación Triunfo' le dejó sin propuesta individual para luchar por ir a Lisboa, decidiendo la productora dejarle un tema, 'Magia' junto a Miriam Rodríguez, que pese a ser pintón y firmado por Funambulista, lo cierto es que no casaba nada con el registro de Agoney.
El propio Agoney nos recibe en la rueda de prensa de presentación de temas de Benidorm Fest y es claro: "La canción era bonita, pero quién dijo que era para mí mentía totalmente". En aquella ocasión, Agoney no pudo ser Agoney, pero ahora, con 'Quiero Arder', la cosa es completamente distinta. Trae un tema rompedor en un registro arriesgado, en el curiosamente habla más que canta. El canario, asume que arriesga con el tema, al mismo tiempo que reconoce que "cuando es verdad", se pueden permitir estas cosas. Promete "arder Benidorm" por completo, en la que probablemente es la propuesta con mejor aceptación y acogida a nivel internacional en lo que llevamos desde que salieron los temas en plataformas digitales.
"Recibo mucho hate en redes, por eso mejor no mirar"
Las redes sociales han sido un tema tabú en esta generación de Benidorm Fest desde su presentación. Es innegable que el asunto del hate en redes se fue completamente de las manos el año pasado, y por eso, en más de una ocasión desde la propia RTVE en voz de la Jefa de Delegación, Eva Mora, se ha recomendado dejar las redes en un segundo plano.
Agoney, siempre ha sido de los más claros al respecto, aunque nos reconoce que sí "hay tentación de mirar". El canario, se acuerda incluso de su comparación con Michael Ben David, el representante israelí el año pasado en Turín "por el simple hecho de que nos gusten los chicos". Al final, concluye que "para espacio seguro, su casa", y que tiene redes, no las sigue tanto como otros participantes, pero tiende a huir un poco de ellas.
Al final, la sensación con Agoney es la de que por fin ha llegado su momento tras cinco años donde Eurovisión le sobrevolaba de una manera u otra. Ahora, con una canción que suena suya y tiene su sello, luchará por un puesto en Liverpool, para hacer arder Europa. Antes, tendrá que hacer lo propio con Benidorm.