El grado de crueldad de algunas personas vuelve a sorprendernos, esta vez desde Turquía, donde unos chavales maltrataron de forma terrible a un cachorro abandonado en la calle. Los jóvenes quisieron divertirse torturando al animal, lo bañaron en pegamento y después lo arrastraron por un barrizal, informa Antena 3. El resultado fue que el perro quedó cubierto por una capa similar al cemento, lo que le impedía respirar bien y dificultaba su riego sanguíneo a algunas zonas de su cuerpo.
El cachorro habría muerto de no ser porque afortunadamente un grupo de veterinarios lo encontraron a tiempo. Tuvieron que cortarle todo el pelo, pero en algunas partes el pegamento se había incrustado a su piel, lo que le ha provocado múltiples heridas. Además, los químicos del pegamento también han dañado su piel, por lo que necesita baños especiales para curarse.
Pese a que tiene una grave infección, el cachorro está en buenas manos. Los veterinarios que lo cuidan lo han llamado Pascal, y afirman que no tendrá que pasar por esto solo, aunque puede que le sea difícil volver a confiar en el ser humano. Ahora, Pascal se recupera de su horrible experiencia gracias a los antibióticos y calmantes que le están suministrando.