Adiós a El Corte Inglés como lo conocemos. La firma de grandes almacenes se encuentra inmersa en pleno giro en su modelo de negocio. La enseña busca adaptarse de este modo a las nuevas tendencias del mercado, en un contexto de consolidación del comercio online, con firmas como Amazon, Zalando o Shein como líderes; y la necesidad de optimizar su red comercial para que sea más rentable.
En el marco de esta política, la firma de grandes almacenes prepara un nuevo futuro para sus antiguos grandes almacenes en Burgos. Se trata del establecimiento situado en la calle Victoria 48 de la capital, que fue inicialmente su primer emplazamiento en la ciudad y que abrió en 1985 con los departamentos de moda juvenil, calzado, electrónica, libros y una agencia de viajes.
Ahora, El Corte Inglés se prepara para dar una nueva vida a este local y mantener de este modo su apuesta y presencia en el centro de la ciudad. Por este motivo, la enseña ha solicitado formalmente todos los trámites para explotar en este lugar un supermercado, en un giro de tendencia que llevaría a la enseña de grandes almacenes a centrarse en la alimentación y competir de este modo con enseñas como Mercadona, Carrefour o Lidl.
El nuevo negocio de El Corte Inglés
Todos los movimientos de la enseña dejan entrever que el nuevo supermercado no abrirá con la marca Supercor. Se trata de un modelo que ha cerrado en Valladolid, en el emblemático local de la calle Puente Colgante, y que también vivió una oleada de clausuras con un acuerdo para la venta de 47 tiendas al Grupo Carrefour.
De este modo, coge mayor fuerza la apertura de un nuevo establecimiento bajo su marca Supermercados El Corte Inglés, que la firma del triángulo verde está independizando de sus centros comerciales, puesto que previamente no se encontraba a pie de calle.
Se trata de un movimiento que ha tenido su máxima expresión en San Lorenzo de El Escorial, en la Comunidad de Madrid. En esta localidad, El Corte Inglés ha cerrado su emblemático Supercor a las afueras y ha instalado un nuevo establecimiento de Supermercados El Corte Inglés.
El nuevo modelo de la firma se aleja en cierta medida del modelo tradicional de supermercado, puesto que busca una experiencia diferenciada y más completa. Para ello, ha instalado un importante punto Gourmet en el que se permite consumir todo tipo de productos del local recién elaborados, pero también una segunda planta con una tienda Unit, en la que vende su nueva división de ropa 'low cost', originaria de sus hipermercados Hipercor, y con la que pretende competir con firmas en auge como Primark, Kiabi, Pepco, Kik o Zeeman.
Cierre de El Corte Inglés
El movimiento de la compañía supone un nuevo impulso a su presencia comercial en Burgos. La enseña cerró en 2022 sus emblemáticos grandes almacenes en la calle La Moneda, en pleno eje comercial del centro de la ciudad, algo que supuso un mazazo a su presencia en esta capital de provincia.
La enseña justificó el movimiento en la decisión de centralizar la práctica totalidad de su presencia en el centro comercial Parque Burgos, situado a las afueras del casco urbano de la localidad. Dicho centro comercial formó parte de la cartera del grupo tras la absorción de Galerías Preciados, puesto que anteriormente operaban bajo dicha enseña.
Pero no ha sido, ni de lejos, el único movimiento de la empresa en este sentido. La enseña del triángulo verde aplica un giro en su división de 'retail' en su plan para desprenderse de activos no estratégicos. Durante los últimos meses también ha acordado la venta de 47 supermercados de Supercor a Carrefour o la venta y cierre de grandes almacenes como Parquesur, La Vaguada o Serrano, 52 (todos en Madrid), su centro comercial Francesc Macià o Meridiana en Barcelona o los grandes almacenes en la calle Colón, 1 en Valencia, en el edificio de Colón-Ruzafa.
Los ajustes han generado buenas perspectivas en la enseña, que progresivamente está posicionándose para abandonar la crisis que ha afectado al grupo y que llevó en 2019 a ser calificado como 'bono basura' para, ahora, alcanzar nuevamente el 'grado de inversión' desde las agencias de calificación.
Acuerdo de El Corte Inglés con Carrefour
En este plan de clausuras que aplican los grandes almacenes, destaca el acuerdo que la firma suscribió en septiembre de 2023 con Carrefour. Inicialmente se planteó para el traspaso de 47 tiendas de Supercor, una cifra que luego se redujo a 43 y finalmente ha quedado en 41 establecimientos.
El acuerdo finalmente se ha completado ante la llegada de 2025 y El Corte Inglés ya ha completado el traspaso de todos los establecimientos. La última tienda en ser transferida ha sido el Supercor ubicado en Sevilla, acondicionado durante el último trimestre del años.
Los cierres se han extendido por las comunidades de Madrid, Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana. Así se puede comprobar por ejemplo en la capital, donde Supercor ha desaparecido en lugares tan destacados como Ventas, Bravo Murillo, Delicias o García Noblejas.
Las tiendas han sido reconvertidas a las enseñas del grupo Carrefour, incluyendo Market o Express; así como su nueva división 'low cost' Supeco, que choca frontalmente con el modelo de negocio que hasta ahora había aplicado El Corte Inglés en estos establecimientos.
Un plan análogo fuera de nuestras fronteras
El giro en las tendencias del mercado está llevando a un giro en la estrategia comercial de las empresas del textil, que buscan adaptarse a las nuevas tendencias. Esto implica intensivos planes de cierres de tiendas, como los ejecutados por El Corte Inglés o Zara, para reconvertir el modelo al negocio online y competir con 'retailers' nativos como Amazon, Aliexpress o Zalando; así como concentrar el ámbito físico en lugares turísticos y formatos basados en experiencias.
En este contexto se encuentra la reconocida multinacional de los grandes almacenes Macy's, similar a El Corte Inglés, Harrod's, Galerías Lafayette o Falabella, que ha intensificado un plan de ajuste estratégico que ha implicado el cierre de 65 tiendas durante 2024 y que supone un crecimiento respecto a la previsión inicial, de medio centenar.
Este movimiento se enmarca dentro de una estrategia comercial que se plantea a tres años, por la que se busca el cierre de un total de 150 ubicaciones consideradas no estratégicas y de bajo rendimiento, en un plan que ha sido bautizado como 'A Bold New Chapter'. Un giro que El Corte Inglés ya ha emprendido durante los últimos años.
El objetivo de estos cierres es consolidar una red de tiendas más eficiente, rentable y capaz de adaptarse a las nuevas realidades del mercado. Es decir, concentrar la oferta en puntos que permitan atraer a turistas o personas en busca de ocio para que conecten con la marca y sus productos e incluso se puedan plantear después su compra a través de internet.
El director financiero de Macy's, Adrian Mitchell, ha explicado que las tiendas afectadas han dejado de ser rentables, puesto que se han ubicado en los centros comerciales menos frecuentados y donde los costes de operación se han vuelto difíciles de justificar.